
El III Fórum Gadea por la Ciencia, que se ha planteado con el objetivo de alcanzar el diagnóstico del Sistema Español de Ciencia, Tecnología e Innovación y las posibles vías de mejora para favorecer la colaboración público-privada en este ámbito, ha reunido a importantes representantes nacionales del mundo científico, empresarial y político. El consejero de Ciencia, Universidad e Innovación de la Comunidad de Madrid, Eduardo Sicilia, ha asegurado que "en España contamos con todas las capacidades para volver a vivir un siglo de oro. Solo tenemos que saber apoyarlas y priorizarlas para aprender más y a un ritmo todavía más rápido y, para ello, entendemos que las empresas son un eslabón fundamental".
A pesar de la relevancia global de la investigación científica nacional, la inversión en I+D, que actualmente supone el 1,2% del PIB, está condicionada por factores como el porcentaje de gasto público ejecutado, que se sitúa en torno al 50%; las inexistentes vías de financiación y colaboración público-privadas, y el escaso apoyo público a la I+D empresarial. Más allá de la inclusión de la empresa en el SECTI, los científicos han coincidido en señalar que la búsqueda y retención de talento y la falta de voluntad política también son algunos de los grandes lastres del modelo científico actual.
Según Javier Ponce, director general del Centro de Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI-EPE), existe un problema endémico que conduce al desequilibrio existente entre la financiación pública y privada. "En España, las grandes empresas solo representan el 55% de la inversión privada en I+D, lo que demuestra que el colectivo de Pymes hace un esfuerzo extraordinario. Necesitamos contribuir al crecimiento de nuestras empresas para que puedan hacer aportaciones sustanciales a nuestra ciencia", expone.
En este sentido, Pedro Mier, presidente de la Asociación multisectorial empresas de electrónica, tecnologías, información y comunicación, telecomunicaciones y contenidos digitales (AMETIC), ha explicado que la contribución del tejido empresarial a la I+D+i está condicionada por su tamaño y la disonancia de intereses respecto a los de la academia científica, pero asegura que el entorno está lleno de oportunidades. "Las pequeñas empresas se ven más limitadas para invertir en ciencia que las grandes corporaciones, pero muchas son capaces de competir internacionalmente. Es evidente que si no innovaran no podrían subsistir en un mercado abierto y, en el contexto actual, el cambio tecnológico es una oportunidad y un riesgo".
Por su parte, Enrique Playán, director Agencia Estatal de Investigación (AEI), ha incidido en que "las Administraciones Públicas son la sociedad a la que representan y sus valores son compartidos, pero necesitamos que aumente su compromiso con la I+D+i. Estamos a tiempo de abrir una discusión social sobre los planes de investigación científica y de potenciar la coordinación y las sinergias del sector público con el ámbito privado".
El talento de las universidades: asignatura pendiente de España
Tal y como ha explicado María Vallet, consejera de la Fundación Gadea por la Ciencia y catedrática de Química Inorgánica y Biorgánica, "generamos conocimiento que tiene que transferirse a la sociedad, pero esto no sucede y los estudiantes tampoco se están formando para ello. Desde la universidad tenemos que enseñar, investigar y formar, pero estamos perdiendo progresivamente masa crítica. Los que deciden investigar ven cómo se frenan sus proyectos aduciendo falta de recursos y, en otros casos, no pueden hacerlo por exceso de carga docente".
En este sentido, Javier García Martínez, patrono de la Fundación Gadea por la Ciencia y catedrático de Química Inorgánica y director del Laboratorio de Nanotecnología Molecular, ha manifestado que "ser líderes en abandono escolar y paro juvenil define muy bien dónde estamos. Aunque tengamos excelentes científicos, muchos de ellos están trabajando en el extranjero. Sin duda, la ciencia es una oportunidad para mejorar nuestra marca como país".
Para Juan Luis Arsuaga, presidente de la Fundación Gadea por la Ciencia, "a través de este debate teórico y práctico, queremos romper con el desconocimiento mutuo y establecer el puente de conexión que funcionará como garante de la ciencia española". Desde la dirección de la Fundación Gadea por la Ciencia, José Antonio Gutiérrez, también ha destacado que "la ciencia ha alcanzado el mayor rango administrativo y ese es el camino correcto".