
España es el cuarto país de la Europa de los Veintiocho donde más se falsifican productos cosméticos y de higiene personal, sólo por detrás de Bulgaria, Lituania y Grecia. Y es que, en nuestro país se pierde anualmente el 17,1 % de las ventas del sector, lo que se traduce en términos absolutos en el mayor impacto para la actividad empresarial del sector en la UE (949 millones de euros).
Así se deriva del Informe del impacto económico de las falsificaciones en el sector cosmético y productos de higiene corporal elaborado por la Oficina de Armonización del Mercado Interior (OAMI), a través del Observatorio Europeo de las Vulneraciones de los Derechos de la Propiedad Intelectual que alberga la citada Agencia Comunitaria que pone de manifiesto el sector legítimo de ventas de cosmético pierde alrededor de 4.700 millones de euros de ingresos anualmente debido a la presencia de productos falsificados, en particular cosméticos (perfumes, productos de belleza y maquillaje) y productos de higiene personal como cremas de protección solar, champús, pasta de dientes, crema de afeitar o desodorantes, en el mercado de la UE, lo cual equivale al 7,8 por ciento de las ventas del sector. Esto supone la pérdida de aproximadamente 50.000 puestos de trabajo.