La 'divisa común' seguirá apreciándose contra el 'billete verde' impulsado por la baja volatilidad diaria del cruce. Las divisas más fuertes en el cuarto trimestre del año son la libra y el yen.
Las referencias de esta semana contribuyeron nuevamente a apreciar al euro. La ausencia de novedades en la reunión de política monetaria del BCE y el giro de la situación política italiana llevan de nuevo al euro/dólar por encima de 1,36 y hacia máximos de este año.
Las divisas cíclicas como el euro o la libra han tenido fuertes repuntes y se espera que continúen apreciándose contra divisas refugio como el dólar o el yen. Por otro lado, los datos económicos en Reino Unido son cada vez más positivos y parecen apuntar que la recuperación económica se producirá antes de lo previsto, además y por lo se desprende de las últimas actas publicadas, el Bank of England (BoE) no apuesta de momento por más estímulos. La depreciación de la libra los últimos años, los bajos tipos de interés y una adecuada política de austeridad han sentado las bases para la recuperación económica, dando un espaldarazo importante al consenso keynesiano que auguraba un cataclismo importante de su economía cuando empezaron los recortes de déficit y deuda.
En lo referente a euro y el billete verde, técnicamente el precio tenía un soporte importante en la zona de 1,2950 y como comentamos antes de verano el euro/dólar tenia una inercia claramente alcista sustentada en la baja volatilidad diaria del cruce con todos los promedios móviles por debajo de 100 puntos y en la inercia claramente alcista del petróleo. Interesante el PMI de la zona euro cuya lectura de agosto y septiembre lo consolidan por arriba de 50 siendo las más alta de los dos últimos años.
El círculo de baja volatilidad diaria en el que está inmerso el euro/dólar desde hace más de un año se traduce en que se capitalizaron posiciones compradoras de largo plazo y que la inercia del euro era alcista. Esta variable llegó a alcanzar más de 300 puntos durante el episodio Lehman y hasta 2012 superaba fácilmente los 150 puntos. Desde hace un año tímidamente se superan los 100 puntos.
Las primas periféricas cada vez más relajadas en la zona de euro y la renta variable europea a fuertes descuentos acompañan la senda alcista del euro. La deuda pública periférica recuperada con fuerza, los tipos en Grecia se sitúan en torno al 10 por ciento frente a los niveles máximos de 2012 del 40 por ciento. España e Italia en niveles anteriores a la crisis del 4,5 por ciento y el bono alemán como activo refugio apunta a que seguirá perdiendo terreno, lo que se traduce en un mayor apetito de riesgo y repunte de TIR tendiendo a converger con la del bono americano.
El 30 de octubre se reúne la Fed y se prevé que no existirá una reversión en materia de política monetaria que pueda debilitar al euro. Por el momento, la debilidad de datos económicos en EEUU esta semana y el cierre Federal contribuyen a seguir apreciando el euro. La victoria reciente de Merkel también crea un clima favorable.
En el gráfico euro/dólar podemos observar cómo la resistencia en 1,3350 ha sido limpiamente traspasada y MACD muestra la aceleración del moviendo alcista al incrementarse la pendiente o diferencia con la señal. A priori, la senda alcista del euro está muy viva. Nos llaman la atención los cruces libra/dólar y euro/yen. El objetivo del primero en los 1,65 libras gestionando un cambio de tendencia que debe llevarlo de por arriba de 1,70 o máximos de 2009. Y el euro/yen en los 135 yenes.