
La industria pesquera española ha decidido diversificar las especies que captura con el fin de ampliar sus opciones de venta, no sólo en el mercado nacional sino y sobre todo en otros internacionales, con el fin de dar alas a sus exportaciones. Más noticias en la revista gratuita elEconomista Alimentación
Especies entre las que se incluye el fletán, muy demandado en los mercados de China y Japón o el marujito -pescado blanco-, consumido especialmente en los países del Este y Norte de Europa como Estonia, Letonia y Lituania, según destaca Arvi, la mayor asociación pesquera española que con sede en Vigo agrupa a más de 160 socios entre los que se encuentran asociaciones de armadores de pesca y organizaciones especializadas en la producción y comercialización de productos pesqueros, que suman un total de 298 empresas. Además de diversificar sus capturas para incrementar las ventas de sus asociados en otros mercados, la entidad persigue fomentar el consumo de pescado en España, especialmente entre los más pequeños, entre quienes ha caído un 20% en los últimos diez años, según sostiene el presidente de Arvi, Javier Touza.
Impacto en los índices de obesidad
Una caída que según la Asociación tiene un impacto directo en los índices de obesidad, cuyo coste ya supera el 10% del presupuesto sanitario nacional. Por eso, y con la vista puesta en mejorar esos niveles de ingesta, desde Arvi abogan por distintas iniciativas que lo consigan. Iniciativas que implican al sector gastronómico, al que le piden que se vuelque en el uso de pescados en la elaboración de sus platos, incluidas las hamburguesas hechas a base de pescado y no de carne, y que desde un punto de vista más oficial piden integrar la educación nutricional en los planes de estudios de forma que haya una asignatura sobre los hábitos nutricionales en la ESO -Educación Secundaria Obligatoria-, tal como han hecho países como Japón.
Otra de las fórmulas que han contemplado para potenciar el consumo de pescado entre la población española es conseguir que el Gobierno aplique un IVA super reducido a este producto, por su componente de ahorro sanitario al ser capaz de reducir los niveles de obesidad, siguiendo el ejemplo de algunos países de nuestro entorno como Italia o Reino Unido.
Precisamente del mercado británico es de donde llega, según Arvi, otro de los retos a los que la entidad tendrá que hacer frente, de cara al programado Brexit. "Estamos trabajando para conseguir una seguridad jurídica y una protección de las inversiones y de los derechos adquiridos de nuestros trabajadores", matiza Touza.
Competencia china
El presidente de la Asociación sostiene que el sector pesquero nacional también hace frente a la amenaza que supone la creciente competencia de algunas flotas, como la China, que quieren acaparar mercados y caladeros tradicionalmente usados por empresas españolas en aguas de terceros países, sobre todo de Latinoamérica, donde precisamente se consiguen algunas de las nuevas especies más demandadas a escala internacional como el marujito mencionado anteriormente.
De ahí que Arvi identifique para este año y los venideros un reto tampoco baladí para sus asociados: renovar la flota para no sólo mejorar la seguridad a bordo sino aumentar la eficiencia energética de los buques. Para ello, la Asociación prevé una inversión de 137 millones de euros este año en el que seguirá trabajando en el desarrollo del denominado "buque pesquero del futuro". Creado a partir del proyecto Aralfufur por el departamento de I+D de Arvi, el nuevo buque está basado en un concepto modular que permite, partiendo de un mismo diseño aplicable a distintas esloras -más de 14 metros-, adaptar distintas capacidades según las particularidades de cada pesquería, lo que genera un importante ahorro de costes frente a las opciones de construcción de barcos de manera tradicional.
Esos buques, matiza la Asociación, se caracterizan por integrar las "más avanzadas tecnologías disponibles actualmente en el sector pesquero en materias diversas, como la propulsión, las comunicaciones, las condiciones de habitabilidad o la seguridad. Un ejemplo de ello es el desarrollo del primer buque de pesca del mundo propulsado por gas natural licuado, más barato y menos contaminante que el petróleo, lo que permite reducir la huella de carbono de la actividad pesquera.