La hostelería acumula dos tercios del consumo de esta bebida en España, frente al 33% que se consume en los hogares. El sector consigue mejorar sus cifras de empleo y está en niveles de 2008.
Con dos tercios de su consumo fuera del hogar, la cerveza se ha convertido en una perfecta aliada de la hostelería española, y muy especialmente de los pequeños y medianos establecimientos. Tanto es así que esta bebida representa el 40 por ciento de las ventas de los bares y restaurantes de menos de 10 empleados, y está en condiciones de suponer la cuarta parte de la facturación de los bares y restaurantes de España en términos generales, ganando la batalla así de forma clara al fino.
La explicación de esas cifras reside en que en 2017 el consumo de cerveza volvió a crecer en la hostelería nacional, hasta un 6,7 por ciento según los datos de la Memoria Anual 2017 de Cerveceros de España. Unos datos que otro año más ponen de relieve que el consumo de cerveza per cápita por parte de los españoles continúa muy por debajo de la media europea.
Un dato que cambia al tener en cuenta el consumo que hacen los turistas de la cerveza cuando visitan nuestro país. Según esos mismos datos, casi una cuarta parte del consumo de cerveza en España lo realizan esos visitantes, fundamentalmente en los establecimientos hosteleros.
De hecho, prácticamente todos los turistas extranjeros (99,5 por ciento) mayores de edad beben cerveza durante su estancia en nuestro país. Y es que la mayoría de los que nos visitan provienen de países con gran tradición cervecera, como Reino Unido y Alemania, atraídos, entre otras cosas, por una gran oferta gastronómica, en el que el tándem cerveza - tapa destaca como un gran exponente de la cultura mediterránea.
Esos turistas son precisamente los que también están contribuyendo al aumento de las exportaciones de la cerveza que se fabrica en España. Exportaciones que según Cerveceros de España han experimentado un gran crecimiento a lo largo de la última década, con un incremento de hasta el 240 por ciento. Los países que más producto nacional importan son Portugal, con cerca de 83 millones de hectolitros, China (46,2), Reino Unido (37,1), Irlanda (31,4) y Guinea Ecuatorial (19,2).
Por canales, la Memoria indica que de los 35,7 millones de hectolitros de cerveza comercializados durante 2017 en España, 19,8 millones se vendieron al sector hostelero, el principal canal de consumo de cerveza. Esta cifra representa un 4,3 por ciento de incremento respecto a 2016.
Mientras, por tipo de envase, las botellas supusieron el 42 por ciento de las ventas, seguidas por las latas, con un 32 por ciento, mientras que la cerveza en barril alcanzó un 28 por ciento. Se utilizó además un 47 por ciento de envases reutilizables y un 53 por ciento de no reutilizables.
En el terreno de la sostenibilidad, dicha memoria destaca el porcentaje de recuperación de envases, que se sitúa en un 82 por ciento. A día de hoy el 20 por ciento de los de vidrio se reutilizan, y el 73 por ciento se reciclan. Si hablamos de envases de metal, se recicla un 83 por ciento.
En el análisis del impacto económico y social, el informe indica que la cerveza aporta más de 3.600 millones de euros al Estado, de los que el 83 por ciento procede del consumo en hostelería, y contribuye a la creación de 344.000 puestos de trabajo, 9 de cada 10 en el sector hostelero.
Jacobo Olalla Marañón, director general de Cerveceros de España, destaca precisamente que "España es el segundo país de la Unión Europea en el que el sector cervecero genera más empleo, solo por detrás de Alemania. El pasado año, por primera vez desde el inicio de la crisis, el empleo directo se situó en niveles similares a los de 2008".