Sol Daurella, la presidenta de Coca-Cola European Partners, entró el año pasado en números rojos en Luxemburgo. Indau, la sociedad patrimonial que encabeza todos sus negocios y que está domiciliada en el Gran Ducado, registró unas pérdidas netas de 192.764 euros en el ejercicio cerrado a 31 de agosto de 2015, frente a un beneficio el año anterior de 535.024 euros.
La empresaria catalana acumula unas ganancias en Luxemburgo de 26,5 millones en años anteriores, pero en el último ejercicio sufrió un severo recorte de los ingresos. Según las cuentas anuales de Indau, a las que ha tenido acceso elEconomista, la sociedad pasó de contabilizar una facturación de 1,2 millones en 2014 a únicamente 130.000 el año anterior. Esta caída coincide en el tiempo con una reclamación en España por parte de la Agencia Tributaria.
Tal y como adelantó elEconomista el pasado 11 de agosto, Hacienda ha reclamado a la empresaria catalana el pago de 6,03 millones de euros correspondiente al Impuesto de Sociedades de los años 2010 y 2011 de una de sus empresas, la firma inmobiliaria Daurin. De la cantidad total, 5,1 millones corresponden al pago de la cuota pendiente y 929.655 euros a los intereses de demora.
Deuda
Daurella se vio obligada a abonar la deuda el año pasado, a raíz de una inspección, pero ha recurrido después ante el Tribunal Económico Administrativo Central (Teac) ya que está convencida de que al final acabarán por darle la razón en el contencioso que mantiene. La inspección se abrió en marzo de 2014 tras la absorción por parte de Daurin de las sociedades Anforis, Guils, Mapa y Vinda. Al cierre del último ejercicio, a 31 de diciembre de 2015, la compañía, en la que Daurella figura como apoderada y cuyo objeto social es el alquiler de inmuebles por cuenta propia, sumaba unos activos por valor de 51,8 millones de euros.
Es una cifra que supone un 17,4% más respecto a los 44,1 millones de euros que tenía el año anterior. Con un volumen de facturación de tan sólo 1,26 millones, la compañía registró unas pérdidas después de impuestos de 491.856 euros, frente a un beneficio el año anterior de 624.289 euros.
Como administradora única de esta sociedad figura Cristina Barcons Bellido, que desde el pasado mes de mayo está al frente también de la luxemburguesa Indau. Barcons sustituyó entonces al holandés Jhr. Van Rickervorsel. Indau, que pagó el año pasado 137.370 euros en impuestos, casi el doble que un año antes, mantiene en Luxemburgo activos por un importe de 33,5 millones de euros y tiene acumulados capital y reservas por 32,3 millones.
A pesar de haber entrado en número rojos con su matriz luxemburguesa, las finanzas de Daurella están, en cualquier caso, completamente saneadas.
Dividendos
De hecho, la presidenta de Coca-Cola European Partners, una de las grandes fortunas de España, ha cobrado este mismo año 83,4 millones de euros en concepto de dividendos de la antigua embotelladora en el mercado nacional -Iberian Partners- antes de su fusión en el nuevo grupo europeo.
Aunque no refleja lógicamente estos ingresos, Begindau, la empresa cabecera de sus negocios en España, sumó el año pasado activos por valor de 196,2 millones. Sin deuda bancaria y con unos ingresos en el último año por un importe total de 10,5 millones de euros, el beneficio de esta firma patrimonial , al igual que ha pasado con Indau, registró una importante caída en el último año. Pasó de ganar 12,3 millones de euros en 2014 a 662.754 euros en el último ejercicio.