
Tras casi 30 años del eslogan El frotar se va a acabar, la multinacional alemana Henkel lanza este septiembre un nuevo producto adaptado a los cambios de la sociedad. Esta vez bajo el lema Sin frotar, pureza total, el nuevo WippExpress se sigue imponiendo en el mercado de Henkel Ibérica como el producto que recapta alrededor del 40 por cierto del total de las ventas.
Según la directora de marketing para España y Portugal, Núria Ribé, con el lanzamiento de este nuevo jabón la insignia Henkel se mantiene en la segunda posición del pódium de detergentes e higiene del hogar en la península. Por encima, solamente se sitúa la multinacional estadounidense de bienes de consumo Procter&Gamble.
Núria Ribé presenta el nuevo producto dentro de un contexto: la sociedad dinámica y práctica que cada vez tiene menos tiempo para dedicar a la colada. "El 92 por ciento de las casas españolas lavan la ropa a -40ºC", comenta Ribé. En este sentido, la reciente edición de WippExpress permite lavar a temperaturas más bajas y usar programas cortos con la misma eficacia.
Según un estudio elaborado por la propia firma, tomar este tipo de medidas puede ahorrar hasta un 80 por ciento de energía y alrededor de un 70 por ciento de agua al mes.
Producción local y sostenible
El nuevo WippExpress se produce en la planta que Henkel Ibérica tiene en Montornès del Vallès (Barcelona) y se comercializa en España y en Portugal. En esta planta se produce mediante una técnica que permite mezclar ingredientes de detergente en polvo sin añadir agua. De esta manera, el detergente no necesita ser secado en la torre de aspersión y esto representa una disminución de hasta el 20 por ciento de consumo de gas y un 23 por ciento de consumo de agua.
En cada filial de Henkel se ha establecido un consejo de sostenibilidad para promover el desarrollo sostenible a nivel local, como el que se promueve desde Montornès.
Más allá del ámbito local, la política de sostenibilidad de Henkel pasa por destinar un 3 por ciento del total de sus ventas al departamento de investigación y desarrollo. En 2008, el I+D+i ocupó a 2.900 personas y movió una inversión de 429 millones de euros.
Los objetivos que Henkel ha establecido a nivel mundial desde ahora hasta 2012 son reducir un 15 por ciento más el consumo de energía, un 10 por ciento el de agua, otro 10 por ciento los residuos y un 20 por ciento los accidentes laborales.
Henkel ha sido premiada por su política de sostenibilidad en diversas ocasiones. Este año recibió el premio a la compañía más ética, desde Nueva York y el galardón de sostenibilidad de Wal Mart.