El anuncio oficial del Real Madrid de rescindir el contrato de Fabio Coentrao, ha provocado un hecho en el conjunto de la capital que llevaba sin producirse desde 2007. La plantilla de la temporada 2018/2019 será la primera sin que en el vestuario blanco haya, salvo fichaje sorpresa, un jugador representado por Jorge Mendes. En estos once años han pasado por el Santiago Bernabéu nueve futbolistas y un entrenador que eran gestionados desde la empresa Gestifute, fundada por el famoso agente.
Todo comenzó el 11 de julio de 2007, cuando el club presidido por Ramón Calderón pagaba 30 millones por un central del Oporto. De esta forma llegaba Pepe al Real Madrid, un brasileño nacionalizado portugués que representaba un entonces no tan conocido Jorge Mendes. Pero no era el primer jugador que el agente llevaba hasta las puertas de la Castellana, pues en 2004 ya intentó lograr el traspaso de Ricardo Carvalho aunque el Madrid, de la primera etapa de Florentino, lo desestimó por ser demasiado caro.
Carvalho sí que llegaría tres años más tarde, precisamente para formar pareja atrás con Pepe, pero entre los dos centrales, la agencia de representación Gestifute consiguió colocar a otros tres futbolistas y un entrenador en las oficinas del Santiago Bernabéu. Ezequiel Garay fue el segundo en llegar y lo hizo en la temporada 2008/2009, tras destacar con el Racing de Santander. El conjunto merengue pagó 10 millones de euros por un argentino que prometía mucho futuro, pero que nunca consiguió dar el gran salto deportivo que auguraban sus ojeadores.
En la temporada siguiente se produjo el gran 'pelotazo' de Gestifute con el jugador que les catapultó a la fama mundial. Tras duras negociaciones con el Manchester United, el 6 de julio de 2009 Cristiano Ronaldo se presentó ante la afición madridista. Fue el fichaje estrella en el regreso de Florentino Pérez a la presidencia y por 94 millones, Mendes y el Madrid firmaron un acuerdo histórico.
Un representado por año, la teoría que el portugués llevaba hasta los blancos pero que se rompió en el verano de 2010 cuando, antes que Carvalho, llegaron Ángel Di Maria y José Mourinho. El interior argentino desembarcó desde el Benfica por 33 millones como un refuerzo de lujo y uno de los jugadores que más estaba despuntando en Europa. Además, el éxito de Inter y el fracaso del Madrid en la temporada anterior acabó con el deseado Mourinho dirigiendo el banquillo blanco, previo pago de ocho millones a los italianos. Otro de los grandes representados de Mendes y que llegó a tener ese año hasta cinco jugadores de Gestifute a su orden.
La temporada siguiente llegó el que ha sido hasta ahora el último bastión del agente portugués en el Madrid. Fabio Coentrao fichó tras pagar el club español 30 millones de euros al Benfica, mismo equipo al que se marchó Garay tras no lograr triunfar en el Bernabéu. El defensa argentino fue el primer jugador de Mendes que dejó el club merengue.
Las buenas relaciones entre Florentino y Gestifute dieron sus frutos otro año más. En 2012, cuando un joven y desconocido Fabinho era cedido desde el Rio Ave para el Real Madrid Castilla. Debido a que no triunfó de blanco, aunque llegó a jugar un partido con el primer equipo en el que dio una asistencia, al final de esa temporada regresó al Rio Ave antes de comenzar a relanzar su carrera profesional.
El progresivo adiós de Jorge Mendes
El 'clan Mendes' había tenido hasta siete representados en Madrid, pero el verano de 2013 comenzó su desintegración. Mourinho dijo adiós tras varias polémicas dentro del vestuario, Fabinho no consiguió que el Madrid renovase su cesión y Carvalho fue el tercero al quedar como agente libre.
En 2014, con la segunda temporada de Ancelotti en el banquillo, el reciente campeón de Europa fichó a James Rodríguez. El colombiano fue de lo más destacado del Mundial de Brasil y, previo pago de 75 millones al Mónaco, ha sido el último fichaje de Mendes por el Madrid. Pero lejos de aumentar el número, la llegada de James conllevó la salida de Di Maria, con el que el club blanco hizo caja al venderle por otros 75 'kilos' al Manchester United.
Ya eran solo cuatro los representados por Gestifute en el Madrid. Un número que en el siguiente año volvió a disminuir hasta quedarse en tres con la cesión de Coentrao al Mónaco. El mismo acuerdo al que llegó, en 2016, el único español de Mendes en el Madrid. El canterano Burgui se marchó al Sporting de Gijón por una temporada sin haber jugado oficialmente con el primer equipo.
Todo antes de que llegase 2017, el año que más bajas hubo de la agencia portuguesa en Madrid. Burgui regresó de su año en Gijón y fue vendido al Alavés por tres millones de euros, Coentrao consiguió salir cedido a cambio de un millón al Sporting de Portugal, Pepe dijo adiós a diez años de blanco tras finalizar su contrato y James se marchó cedido por dos años al Bayern de Múnich a cambio de 13 millones y una opción de compra cercana a los 40 millones de euros.
Una 'sangría' que dejó solo a Cristiano al frente del bloque de Mendes. El que ha sido el gran bastión y el predilecto del agente, dejó Madrid por Turín tras nueve años de éxitos blancos para comenzar una nueva etapa en la Juventus. Una salida que ha continuado Coentrao una vez que ha regresado de su cesión del Sporting y no ha entrenado con la plantilla blanca en todo el verano.
En total, Jorge Mendes ha hecho invertir al Real Madrid en fichajes 288 millones de euros, una cifra mayor a los 197,5 que ha recibido el club blanco por las ventas y cesiones que ha negociado el agente de Gestifute. Lo que supone un balance de 90,5 millones más en las adquisiciones que en los jugadores que se han marchado, a lo que se le podría restar otros 40 'kilos' si el Bayern ejecuta la opción de compra por James en junio de 2019.
El que fuese en su día el agente que más se paseó por las oficinas del Santiago Bernabéu, se ha quedado sin jugadores doce temporadas después. Pese a ello, Gestifute y su líder seguirán llevando ofertas a la directiva de Florentino Pérez, aún con la incógnita de saber qué ocurrirá con el centrocampista colombiano y su futuro en la Bundesliga.