Por primera vez desde 1988 la Federación Española de Fútbol (RFEF) tiene un presidente electo distinto de Ángel María Villar. Luis Rubiales, expresidente de la Asociación de Fútbolistas Españoles (AFE) fue votado ayer por una amplia mayoría de la Asamblea como el recambio de Villar. "El cambio será imparable", dijo apenas supo de su elección. ¿Qué significará este cambio?
Por ahora, Rubiales ha desgranado apenas trazos gruesos de una modificación que, sustentándose incluso en esas ideas iniciales, apunta a una revolución en toda regla.
La tendrá que ejecutar a toda velocidad porque será en 2020 cuando tenga que someterse otra vez al voto de la Asamblea. Para entonces el presidente de la RFEF promete haber modernizado y cambiado en profundidad el organismo.
Su primera medida, una auditoría
La vertiente económica será uno de los vértices más relevantes de su mandato. De hecho, ayer anunció que lo primero que haría hoy al acceder a la sede de la RFEF sería solicitar una auditoría para conocer el estado de las cuentas.
"Mañana a las ocho de la mañana estaré aquí. Hablaré con lo directores de cada departamento, pediré un informe y a partir de ahí trabajaré. Es importante ver cómo está la economía. Voy a poner en liza una auditoría nada más llegar", afirmó en su comparecencia pública tras el triunfo.
Rubiales anda preocupado por conocer la salud real de las cuentas de la RFEF después de que el caso Villar dejara en duda el estado de la salud económica de la Federación. Al expresidente se le acusó de haber usado su posición en el organismo para organizar amistosos que generaban ingresos que luego eran desviados a la empresa que dirigía su hijo.
Fruto de esa niebla de corrupción que envolvió a la RFEF, los patrocinadores no han devuelto la confianza al organismo tras la pérdida paulatina de apoyos que se generó desde 2012, cuando el ciclo triunfal de 'La Roja' se frenó y las marcas dejaron de acercarse al calor de la selección.
Unas cuentas con pérdidas
Tanto es así que la RFEF entró en pérdidas en 2016 por primera vez después de varios ejercicios sumando jugosos ingresos. Según la auditoría de 2016, esas pérdidas ascendieron a 8,354 millones de euros frente a los 857.724 euros de beneficio del ejercicio anterior.
Una partida, la de 2015, en la que también aumentaron los gastos de explotación frente al congelamiento de los ingresos, que quedaron estancados en 134,754 millones de euros, apenas 300.000 más que en 2015.
Rubiales pretende que la modernización de la RFEF implique también una estabilización de estos ingresos por patrocinio y derechos televisivos, de tal forma que no dependan sólo de los éxitos que consigan Lopetegui y sus chicos.
Fútbol femenino, el fútbol sala y el fútbol modesto
Esta estrategia de refuerzo del modelo económico tendrá como beneficiadas las secciones más denostadas tradicionalmente en el seno de la RFEF.
"A nivel institucional dentro del mundo del fútbol la Federación, los clubes y también LaLiga tenemos que ser muy escrupulosos. Vamos a tratar de buscar las mejores soluciones para tres o cuatro asuntos, como el papel de la mujer dentro del fútbol, el fútbol sala, el fútbol modesto, los ingresos para las territoriales y un punto estrella como es la transparencia en la fiscalización", insistió ayer Rubiales tras su nombramiento.
Una transparencia que aplicará desde el primer minuto en las ayudas que reciba la RFEF y que, según el propio Rubiales, "se invertirá de acuerdo con el Consejo Superior de Deportes (CSD)", lo que permitirá, según el criterio del CSD, impulsar el fútbol femenino, la Segunda B y la Tercera División, categorías que, por cierto, ya anunció que no modificará siguiendo el modelo que se aprobó la semana pasada aun bajo el paraguas de la gestión de Larrea.
¿Sin partidos los lunes y los viernes?
Luis Rubiales también pretende abordar cambios que afecten a los horarios de los partidos de LaLiga en Primera y Segunda División, lo que podría tener incidencia en los ingresos que percibe la competición por conceptos televisivos.
"Tebas seguirá poniendo los horarios de Liga... pero tenemos que hablar. Vamos a ver qué nos reporta jugar los viernes y los lunes. Quiero estudiarlo para buscar soluciones, sobre todo para el fútbol modesto. Hay que pensar más en los aficionados. No se pueden jugar partidos en agosto a las 6 de la tarde. El año que viene los horarios los pondrá LaLiga, pero queremos negociarlo", dijo Rubiales en una entrevista en la Cadena Ser en la que también apuntó otros cambios enfocados más en su vertiente deportiva:
1.- Copa del Rey a partido único. Rubiales pretende modificar el torneo y que buena parte de la Copa se juege a partido único, como desean algunos equipos, entre ellos, el Barça. También existe la opción de que la Supercopa se juegue a un único partido, pero aquí deberían aumentarse los ingresos por jugar un sólo encuentro. El modelo actual de ida y vuelta favorece importantes ingresos por taquillaje a los equipos que la disputan.
2.- Adiós a Sánchez Arminio. Rubiales también propondrá cambios en el estamento arbitral. El primero es la salida de Victoriano Sánchez Arminio como presidente del Comité Técnico de Árbitros. Si no dimite, lo cesará. Además, quiere aumentar la edad de retirada de los colegiados (de 45 a 50 años) y potenciar la transparencia que inyectaría a todo el organismo a este estamento tradicionalmente opaco.