Por David y Douglas
NUEVA YORK (Reuters Health) - Después una cirugía mamaria conservadora con rayos, la terapia con electrones, fotones o la braquiterapia de refuerzo aportan los mismos beneficios en las mujeres con cáncer mamario, según afirma un equipo de Bélgica.
"Nuestro estudio muestra excelentes tasas de control locales y locorregionales en las pacientes tratadas con cirugía de mama conservadora seguida de irradiación mamaria total y una dosis de refuerzo en el lecho tumoral", dijo por e-mail la doctora Isabelle Kindts, de los Hospitales Universitarios de Lovaina.
En la revista Breast, el equipo de Kindts publica que esa radioterapia extra reduciría las recaídas. Aun así, se desconoce qué técnica tendría los mejores resultados. Entonces, revisó los datos de 1379 pacientes tratadas entre el 2005 y el 2009 con cirugía conservadora y radiación en todo el pecho por un cáncer mamario invasivo.
La técnica de refuerzo para cada paciente se seleccionó con un diagrama predefinido, de acuerdo con la profundidad del lecho tumoral. La mayoría (1052) recibió un refuerzo con electrones, 225 recibieron braquiterapia y 76, un refuerzo con fotones. A los 8,8 años, el 2,5 por ciento de los pacientes tuvo una recaída local o locorregional. A los 10 años, la tasa libre de reaparición local del tumor alcanzó el 97,9 por ciento.La diferencia de los resultados entre las técnicas de refuerzo no fue estadísticamente significativa, aunque los autores observaron una tendencia a un mejor control local con la braquiterapia de refuerzo.
Además, el equipo halló una leve tendencia al aumento de la sobrevida a los 10 años con la braquiterapia y la terapia con electrones, lo que no se mantuvo tras realizar el análisis de variables múltiples. Los investigadores advierten que, dado que se registraron pocas recaídas locales y locorregionales, "el estudio quizás no pudo detectar una diferencia significativa". Aun así, "el resultado fue excelente, sin importar la técnica de refuerzo utilizada". El radiooncólogo Robert W. Mutter opinó que "el estudio destaca las bajas tasas de recaídas locorregionales en las pacientes tratadas con cirugía conservadora y radioterapia adyuvante en una era de tratamientos relativamente modernos.
Aunque la planificación por tomografía computarizada no sirvió para delinear el volumen del refuerzo (que podría inhibir la posibilidad de orientar con precisión el área en riesgo), con un seguimiento en 8,8 años, apenas el 2 por ciento de las pacientes tuvo una recaída local". Aun así, Mutter, de la Clínica Mayo, Rochester, agregó que "los refuerzos en la cavidad de la lumpectomía están asociados con tasas más altas de fibrosis y efectos adversos con las prótesis cosméticas, aunque no hubo información sobre la toxicidad o los resultados de las prótesis.
Se necesitan más estudios para determinar en qué pacientes los beneficios absolutos de una dosis de refuerzo en la cavidad de la lumpectomía, en términos de mejoría del control local, superarían los riesgos extras de aumentar la dosis de radioterapia".
El equipo declaró no recibir financiamiento externo ni tener conflictos de intereses.