
La familia Pinault, dueña de reconocidas firmas como Gucci, Balenciaga o Yves Saint Laurent, entra en el sector inmobiliario de lujo en España a través de Le Collectionist, la compañía europea especializada en el alquiler vacacional de propiedades premium con servicios exclusivos.
A través de su holding el Grupo Artemis lideró una ronda de financiación de 10 millones de dólares (unos 8 millones de euros) con la que la firma francesa llevará a cabo una estrategia de expansión global que ha arrancado en España con la compra de Bonder & Co.
Fundada en Ibiza por Paloma Bonder, la compañía va más allá de ser una agencia inmobiliaria al uso, ofreciendo a sus clientes rentabilidades anuales de hasta el 35%. Así, gracias a sus servicios de consultoría, asesora a los inversores en la compra o desarrollo de las viviendas.
"Les acompañamos en la compra del suelo, les recomendamos arquitectos e interioristas y les decimos qué debe tener la vivienda para atender las expectativas de nuestros clientes y para alcanzar el objetivo de precio medio de alquiler por semana que hayamos fijado", explica Bonder, directora general de Le Collectionist en España, que asegura que "si siguen nuestra consultoría van a obtener una rentabilidad mínima del 7% y lo máximo que estamos dando es de un 35%".
España, una buena inversión
A lo largo de los últimos años, "hemos acompañado a muchos propietarios en el proceso de compra. Algunos empezaron con una vivienda y ahora tienen cinco", detalla la directiva, que asegura que "España es ahora una muy buena opción para la inversión en vivienda de lujo, que en los últimos cinco años ha experimentado incrementos de precio de hasta el 25%".
Según explica la directiva, entre un 60 y 70 por ciento de sus clientes compra como inversión y un 30 por ciento le dan un uso combinado, ya que ellos mismos pasan algunos meses en la vivienda y el resto del tiempo nos dan su gestión para que la alquilemos".
El precio medio de las viviendas que alquila Le Collectionist es de 26.000 euros por diez días, que es también la estancia media de sus clientes. "Muchos se quedan dos o tres meses y los precios por semana van desde un mínimo de 3.500 euros hasta los 350.000 euros", concreta Bonder.
Estas tarifas incluyen únicamente el alojamiento, ya que la compañía ofrece también servicios exclusivos que se pagan aparte y que van desde los 500 euros hasta los 150.000 euros.
Los esenciales, que van en el paquete de 'Must have', son según Bonder el chofer, yate, chef, entretenimiento y cuidado de niños, donde ofrecemos niñeras con diferentes idiomas o con el método Montessori. Pero además, en cada uno de sus destinos se comprometen a ofrecer diez experiencias exclusivas y locales.
"En Mallorca por ejemplo una de las atracciones más demandadas son las Cuevas del Drach. Nosotros organizamos una cena dentro de las cuevas con un barco y un pianista. También en la isla, cerramos el acuario por la noche y montamos una cena con los mejores chefs y también una estancia para dormir bajo los tiburones", explica la directiva, que asegura que la gastronomía es uno de los servicios más demandados.
Por eso, Le Collectionist acaba de cerrar un acuerdo con una empresa que pondrá a disposición de sus clientes la posibilidad de solicitar que "casi cualquier chef del mundo con estrellas Michelín vaya a cocinar a su casa", destaca Bonder, que asegura que la filosofía de la empresa es "empezar a construir a partir de los deseos de nuestros clientes".
Muchos servicios también incluyen actuaciones privadas de conocidos cantantes. "Nosotros nunca decimos que no a nuestros clientes en su petición. Intentamos conseguir todo lo que nos solicitan".
Además, para "nosotros es muy importante la experiencia local, ya que nadie quiere sentirse como un turista. Por eso, nos preocupamos de que los chófer y los chefs sean locales". "Nuestra filosofía es hacer sentir especiales a las personas y eso se consigue a través de otras personas, esa es la clave de cualquier empresa de servicios exclusivos", destaca la directiva que lleva 20 años en la industria del lujo.
Actualmente, la compañía cuenta con una oferta de 400 viviendas repartidas entre Ibiza, Formentera, Mallorca y Marbella, pero tiene la vista puesta en Cataluña y no descarta dar el salto a Bilbao y Madrid más adelante. El valor de las propiedades que oferta, entre las que se encuentra una isla, se mueve entre los 1,5 y los 100 millones de euros.
A nivel global, la de Bonder & Co ha sido la primera adquisición de Le Collectionist, que actualmente cuenta con presencia en 100 destinos, con 2.400 propiedades y 12 oficinas. "El objetivo es alcanzar las 100 oficinas y hacerlo con adquisiciones en cada uno de los mercados".