
Desde hace algún tiempo el interés por la buena alimentación y la dieta saludable está a la orden del día. Sin embargo, a veces, compatibilizar una alimentación equilibrada con el ritmo de trabajo es complicado.
A veces falta tiempo para comer. Y parece que un grupo de emprendedores ha dado con una solución. Y como no, también viene de Silicon Valley pero esta vez no es una empresa de software.
Enric, Roxane y Albert, con el apoyo de Laboratoires Grand Fontaine, han lanzado Küik Meal, un formato de bebida que se inspira en los batidos de moda en la cuna de las grandes empresas tecnológicas, Silicon Valley en California.
Este alimento, de momento en forma de batido, está pensado para ser consumido en cualquier momento y permite sustituir una comida en aquellos momentos que no tenemos tiempo para pararnos a desayunar, comer o cenar o bien el lapso entre una actividad y otra es realmente estrecho y necesitamos una solución on the go.
Para saber un poco más del proyecto, recibe a elEconomista uno de sus fundadores, Enric Miquel, farmacéutico. Nos relata que la primera vez que leyó sobre el tema fue hace dos años, en un periódico, donde se hablaba sobre cómo sería la comida del futuro. En esos momentos trabajaba en Laboratoires Grand Fontaine en la rama de nutrición médica y el tema atrajo su atención de inmediato.
En ese artículo se comentaba que en Silicon Valley ya habían inventado una nueva forma de alimentarse: no perdían tiempo, la dieta era equilibrada y podían reducir su consumo de comida tipo fast food. Y se dio cuenta de que la composición era muy parecida a los preparados con los que Enric trabajaba en la empresa. Podía haber alguna oportunidad. ¿Habría sinergias? Pero como a veces ocurre, por varias razones el proyecto quedó aparcado hasta 2017.
Entonces, y por casualidad, el hermano de Enric, que vivía y trabajaba en Silicon Valley, le habló de una nueva forma de alimentarse que le estaba ayudando a ganar tiempo sin descuidar el equilibrio de la nutrición. ¿Casualidad? Tal vez. Pero le despertó otra vez la curiosidad y se fue a California para investigar y probar el invento. La satisfacción no fue total, buen marketing pero poco más.
De este viaje volvió con varias muestras a Barcelona y fue aquí donde el equipo vio que el producto era muy mejorable en su composición. Y se pusieron a trabajar empezando desde cero, para reinventarse. Había nacido Küik Meal.
Se formó un pequeño equipo con dos personas más: Roxanne para todo lo relacionado con redes sociales y el entorno digital, y Albert como responsable técnico y experto en nutrición. En mayo de este año presentaron el concepto en la incubadora de startups Barcelona Activa, y en junio ya estaban en el mercado, vendiendo 100 por cien online.
Calorías estándar
Küik no es un batido de control de peso, su target no son los consumidores que siguen una dieta hipocalórica. Sus batidos aportan una ración estándar de calorías -tomando como base 2.000 kcal/día- y cubren aproximadamente el 25 por ciento de esta cantidad por cada toma, es decir unas 500 kcal. Es una dieta completa, en polvo, y dirigida a sustituir puntualmente una comida o comer menos entre las mismas.
En Estados Unidos, donde otra marca ya lleva un tiempo en el mercado, esta nueva forma de alimentarse se ha hecho un hueco entre los llamados millennials o generación Y, un público que busca tener más tiempo para sus aficiones, cuyos trabajos tienen horarios intensivos y comprimidos y que también miran especialmente por su alimentación, huyendo de trans y grasas saturadas.
El equipo de Küik apunta a este segmento, y han complementado su campaña con una estrategia de embajadores dentro de distintos colectivos: un esquiador, un surfero, un escalador, un piloto, etc.
La preparación es muy rápida. Se crea el batido base con un sabor neutro y luego se escoge entre seis saborizadores: vainilla, chocolate, cookies, fresa, verduras y multisabor, llamados Küik Flavour Boost, que se añaden sobre el Küik Meal base neutro. Esto se prepara en un vaso con tapa de 700 ml que es cómodo para transportar.
Según declara Enric, sus planes pasan por estudiar la extensión de la gama hacia el formato barrita, pero insiste en que su valor diferencial es que su propuesta es única: una base neutra y la posibilidad de darle distintos sabores, sean dulces o salados. Y dentro de este concepto de nutrición "completa" -es decir, con todas las proteínas, carbohidratos, lípidos, fibras, vitaminas y minerales necesarios- no descartan otros formatos, como podría ser la botella lista para beber.
A parte, por su composición es apto para vegetarianos y celíacos, y en este sentido estudian la posibilidad de ampliar a gamas aptas para veganos e incluso para alérgicos a la lactosa.
En el poco tiempo que llevan en el mercado ya están percibiendo una buena acogida, entre otros, como sustituto puntual de los desayunos, que según indican múltiples estudios es la comida más maltratada de la jornada, con casi un 25 por ciento de personas que no desayunan o ingieren lo mínimo.
El producto se elabora 100 por cien en España, concretamente en Asturias. Desde junio ya han servido más de 7.000 comidas. Paso a paso, pero con un plan de crecimiento ambicioso, que pasa por facturar 5 millones de euros en 2020, en palabras de Enric Miquel.
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