
Seat ha presentado esta tarde el Seat Tarraco, su primer gran todocamino (SUV), con hasta siete asientos, con el que completa la gama iniciada con el Ateca y el Arona. El nuevo modelo quiere ser emblema de la marca por su diseño y su calidad, y pretende aportar nuevos clientes y mayor rentabilidad.
El presidente de Seat, Luca De Meo, ha incidido en la necesidad de ampliar márgenes para contar con recursos para las próximas inversiones, como los nuevos sistemas de propulsión (como el vehículos eléctrico) y la conectividad.
Respecto al nuevo vehículo, ha ejemplificado que el objetivo del Tarraco es atraer a compradores europeos que hasta ahora veían a Seat como marca para el segundo vehículo del hogar por el tamaño más pequeño de sus modelos. Ahora, podrán barajar al Tarraco como opción de coche familiar principal.
Su perfil no es el de grandes volúmenes de producción, como el León o el Ibiza, pero su fortaleza radica en que aporta mayor rentabilidad a la firma por cada coche vendido, que rondará un precio base de 30.000 euros cuando llegue a los concesionarios a principios de 2019 -con preventa desde diciembre-.
Con todo, El Tarraco prevé ser el quinto modelo en ventas de Seat, por detrás del León, el Ibiza, el Arona y el Ateca. Diseñado en Martorell (Barcelona) y producido en Wolfsburg (Alemania), debutará con opciones gasolina y diésel, aunque en el futuro prevé añadir la opción de híbrido enchufable.
Así, Seat espera grandes cosas del que es un gran coche, con 4,7 metros de largo y 1,65 de alto. Es una de sus principales apuestas hasta el próximo gran reto de la marca: su primer modelo 100% eléctrico, previsto para 2020.