
El líder de Cs, Albert Rivera, pidió ayer al presidente de la Generalitat, Joaquim Torra, que retire los lazos amarillos del espacio público y remarcó que, si no lo hace el Ejecutivo autonómico, debería hacerlo el Gobierno de Pedro Sánchez.
Además, aseguró que "no habrá convivencia" si no hay neutralidad en el espacio público. Las declaraciones de Rivera tuvieron lugar en Alella (Barcelona), después de que el líder de Cs y la presidenta del partido en Cataluña, Inés Arrimadas, quitaran lazos amarillos de la calle, que después repusieron varios vecinos de la localidad.
El portavoz del PSOE en el Senado, Ander Gil, acusó a Cs de "alimentar el conflicto", mientras que el líder del PSC en Barcelona, Jaume Collboni, culpó a la formación naranja de utilizar los lazos "como arma política de distracción masiva". Por su parte, la portavoz de Unidos Podemos en el Congreso, Ione Belarra, pidió a Rivera que "no eche más leña al fuego", mientras que el presidente del PP, Pablo Casado, reclamó que se actúe contra quienes ponen lazos amarillos.
Esta eliminación de símbolos independentistas de ayer coincidió con otra retirada de lazos en varias localidades de Barcelona y Girona hecha de madrugada por unas 50 personas vestidas con monos blancos.
Sobre la investigación de la Fiscalía a los Mossos d'Esquadra que identificaron a personas por retirar lazos en Tarragona, el sindicato Uspac pidió ayer que se archive la causa e instó a investigar a los altos cargos que instruyen al cuerpo y al conseller de Interior, que son quienes dan las órdenes.
En relación con la presunta agresión a una mujer el sábado en el parque de la Ciutadella (Barcelona) mientras quitaba lazos amarillos, el investigado fue ayer detenido y, horas más tarde, puesto en libertad con cargos y con una orden de alejamiento de 500 metros. La controversia sobre la colocación y la retirada de símbolos se tratará finalmente en la Junta de Seguridad que se celebrará el próximo 6 de septiembre.