
La sociedad público-privada ha facilitado más de 55 millones de euros desde el año 2011 para financiar 'startups' y proyectos de empresas consolidadas en el campo de la eficiencia energética.
El mercado ha captado hace tiempo la necesidad de la sociedad de mejorar la eficiencia energética y de lograr una mayor generación proveniente de fuentes renovables. Muchos proyectos empresariales han surgido en las últimas décadas para dar una respuesta a esta necesidad, pero se han encontrado con la barrera de la financiación o sin suficiente conocimiento de cómo convertir una idea innovadora en un producto atractivo para el mercado.
Para suplir este vacío, la Comisión Europea abrió un concurso para el lanzamiento de una sociedad público-privada que fomentase las sinergias entre educación, innovación y negocio en el campo de la energía, que finalmente se adjudicó a InnoEnergy.
Desde 2011, esta firma ha logrado facilitar una inversión total de más de 55 millones de euros en España para dedicarlos al crecimiento de empresas nacientes y a proyectos específicos en compañías consolidadas, siempre en el segmento de la eficiencia energética.
¿Cómo aporta InnoEnergy la financiación al ecosistema empresarial de innovación energética? "En el caso de las startups, aportamos recursos a cambio de una participación accionarial, que posteriormente podemos monetizar si el proyecto es exitoso. Si la empresa no funciona, perdemos la inversión. Este es un riesgo que debe aceptarse en un sector con un gran peso de innovación", comenta el consejero delegado de InnoEnergy Iberia, Mikel Lasa.
En este sentido, Lasa apunta que InnoEnergy tiene una política de selección muy estricta y que solo se aceptan el 7 por ciento de los proyectos que llegan a la compañía. Por consiguiente, la tasa de supervivencia de estas startups es muy elevada. Concretamente, el 95 por ciento superan satisfactoriamente sus primeros seis años de vida.
En empresas más maduras, InnoEnergy trabaja con un sistema de royalties para financiar un proyecto y garantizarse un retorno económico. "Estudiamos su modelo de negocio y acordamos un porcentaje de ingresos sobre las vendas de un producto determinado, de modo que en un período de tiempo habremos recuperado la inversión inicial", añade Lasa.
Los sectores que concentran la mayor parte del asesoramiento por parte de InnoEnergy Iberia son las energías renovables, especialmente la eólica, la solar fotovoltaica y la solar térmica, pero sin olvidar proyectos más "disruptivos" y a largo plazo como la energía mareomotriz, explica Lasa.
También destacan los proyectos de redes inteligentes y los de almacenamiento eléctrico -que confluyen en el desarrollo de un producto tan prometedor como el vehículo eléctrico-, y las ciudades y los edificios inteligentes.
Como un ejemplo de innovación en el sector de la eficiencia energética patrocinado por InnoEnergy, Lasa cita a el proyecto de la start-up catalana Eolos. La firma trabaja en soluciones tecnológicas para medir la idoneidad de un emplazamiento marino para ser óptimo en la generación de energía eólica. Eolos ha ideado plataformas flotantes que reducen en un 90% los costes de los sistemas tradicionales de medición, basados en la instalación de torres con molinos provisionales.
Aparte de lo todo lo mencionado, InnoEnergy organiza otros eventos para facilitar la financiación a ideas de negocio en el campo de la innovación energética y medioambiental, como el CleanTech Camp. El concurso se desarrolla en España y Portugal y pretende captar proyectos en el mundo universitario que puedan convertirse luego en modelos de negocio. Los premios otorgados van de los 20.000 a los 5.000 euros, más los conocimientos en especie para lograr la transferencia tecnológica al mercado.
En la edición de 2018, se presentaron 70 proyectos, de los que 10 han sido seleccionados para el concurso, que se va a celebrar este junio. Será la cuarta celebración del concurso con el nombre de CleanTech Camp, aunque ya tuvo ediciones previamente bajo el título de EcoEmprendedor XXI.