ERC está perdiendo la paciencia con Carles Puigdemont, ante los reveses jurídicos a la candidatura del expresidente catalán y con la cuenta atrás que ya ha superado la barrera de los 20 días para la convocatoria automática de nuevas elecciones autonómicas, si no hay Govern constituido el 22 de mayo.
El secretario de Economía de la Generalitat y adjunto a la presidencia de ERC, Pere Aragonès, confió ayer en que pueda haber investidura en "cuestión de días" si Puigdemont ofrece un candidato viable en la reunión que tendrá con su grupo parlamentario en Berlín el fin de semana. En este sentido, elogió la figura de la portavoz de JxCat, Elsa Artadi, y afirmó que, si ella fuese el cuarto nombre propuesto para presidir la Generalitat, por parte de los republicanos no habría problema. También elogió a Artadi el número dos de JxCat, Jordi Sànchez, mientras que la pareja de Oriol Junqueras -que ayer cumplió seis meses en prisión preventiva, al igual que Joaquim Forn- urgió a formar Govern, porque cree que ayudaría a los presos.
En este contexto, la ANC preguntará por Internet a sus socios este jueves y viernes si mantienen su defensa a ultranza de Puigdemont como presidente legítimo y están dispuestos a "repetir elecciones hasta que se acepte el resultado" del 21 de diciembre, o bien aceptarían un Gobierno alternativo.
Así las cosas, la reunión de JxCat este fin de semana será clave, tras el veto del Tribunal Constitucional (TC) a la candidatura de Puigdemont y el dictamen del Consell de Garanties Estutàries desfavorable a la modificación legal prevista por los secesionistas para una investidura a distancia, que el pleno del Parlament prevé votar el viernes. Además, Ciudadanos presentará hoy recurso de amparo ante el Constitucional contra el voto delegado de Carles Puigdemont y Antoni Comín.
Registro policial
Al margen de la cuenta atrás para formar Govern, prosiguen las investigaciones judiciales sobre si el anterior Ejecutivo catalán cometió malversación de fondos públicos para organizar el referéndum ilegal del 1 de octubre. Ayer trascendió que, el viernes pasado, la Guardia Civil volvió a registrar la Generalitat en busca de pruebas.
