
Merlin ha logrado su primer inquilino para la emblemática Torre Glòries después de que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) descartara en noviembre instalar su sede en Barcelona.
Conocida históricamente como la Torre Agbar, el rascacielos de 142 metros de altura, acogerá las oficinas de Competence Call Center (CCC), que ha alquilado 9.000 metros cuadrados a través de una operación intermediada por Engel & Völkers, CBRE y Savills Aguirre Newman.
La compañía, uno de los principales proveedores europeos de servicios, se instalará en ocho plantas del edificio situado en el 211 de la Avenida Diagonal, en su confluencia con la Plaza Glòries.
Este rascacielos, el tercero más alto de la ciudad, está siendo reformado para adaptarse a los estándares técnicos y energéticos necesarios para lograr una certificación Leed Gold.
Para ello, la socimi, invertirá 15 millones en esta rehabilitación con la que pondrá a punto la torre, que en plena explotación, está previsto que genere unos ingresos brutos anuales de 10,3 millones y una rentabilidad bruta del 6,5 por ciento.
Merlin pagó por este inmueble 142 millones a la Sociedad General Aguas de Barcelona en enero de 2017. Con esta compra, se desvanecieron los intentos de otros inversores por instalar un hotel en esta icónica torre, que fue una de las víctimas de la moratoria hotelera que aprobó la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
Torre Glòries cuenta con una superficie bruta de 37.614 metros cuadrados distribuidos en 34 plantas sobre rasante y un auditorio para más de 350 personas.
Vacío desde el verano de 2015, cuando Agbar se trasladó a la Zona Franca, "los esfuerzos han sido coordinados para que también el cliente pueda realizar sus propias obras de adaptación con el fin de estar completamente operativos el próximo 19 de mayo de 2018", señala Alberto Sarrias, director general de Engel & Völkers.