
La Fiscalía germana solicitó ayer la extradición del expresidente catalán Carles Puigdemont a España, por los delitos de rebelión y malversación de fondos públicos, y pidió mantenerle en prisión por entender que existe riesgo de fuga.
La Fiscalía justificó su decisión alegando que la celebración de un referéndum contrario a la Constitución -"a pesar de que se esperaban altercados violentos"- puede incluirse dentro del delito de rebelión y que este cargo está recogido tanto por la justicia española como por la alemana, que lo tipifica como "alta traición".
La actuación de la Fiscalía del Estado federado de Schleswig-Holstein complica aún más el futuro político del líder independentista, que se halla detenido en la cárcel de Neumünster tras ser arrestado el 25 de marzo. El abogado de Puigdemont, Jaume Alonso-Cuevillas, admitió que ya se esperaba esta petición, pero se mostró confiado en que el tribunal alemán la "tumbe" y rechace la extradición.
Por su parte, el presidente del Gobierno Mariano Rajoy no quiso valorar la decisión de la justicia alemana, pero manifestó que en Europa rigen los principios "del Estado de Derecho y la separación de poderes".
Delegación del voto
En paralelo al anunció de la Fiscalía germana, la Mesa del Parlament decidió ayer que el expresidente pueda delegar su voto en otro diputado en los plenos. La delegación de voto se aprobó con el apoyo de JxCat y ERC, que tienen mayoría en la Mesa, y con la oposición de C's y el PSC. Los independentistas tomaron esta decisión a pesar de que los letrados del Parlament advirtieron que podía ser contraria a la interlocutoria del Tribunal Constitucional, que puso condiciones a la investidura de Puigdemont.
Esta resolución establecía que "los miembros de la cámara sobre los que pese una orden judicial de busca y captura e ingreso en prisión no podrán delegar el voto en otros parlamentarios".
Los partidos constitucionalistas lamentaron la decisión de la Mesa. Los socialistas catalanes anunciaron que iban a recurrir la medida y se mostraron confiados en que el presidente de la Cámara catalana, Roger Torrent, acepte el recurso, pero no descartan pedir amparo al TC.
La líder de C's en Cataluña, Inés Arrimadas, también avanzó que su partido pedirá a la Mesa que reconsidere la delegación de voto de Puigdemont y argumentó que "un huido de la justicia no puede tener privilegios como delegar el voto".
Por su parte, el PP pidió modificar la ley para que los expresidentes de la Generalitat condenados penalmente y de manera firme "automáticamente pierdan las prerrogativas y privilegios de los que pueden disfrutar".