El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, puso ayer fecha de caducidad a su etapa como líder del Ejecutivo catalán: seis meses después del referéndum.
Es el tiempo que prevé la proposición de ley de transitoriedad jurídica para convocar elecciones constituyentes si gana el sí en la votación sobre la independencia de Cataluña prevista para el 1 de octubre. También recordó que, si gana el no, finalizará antes su mandato porque convocará elecciones autonómicas.
Puigdemont ya había anunciado que su tarea como líder del proceso de ruptura acabaría con la celebración del referéndum, por lo que ayer concretó en una sesión de preguntas de ciudadanos a través de redes sociales que no se presentará como candidato en los comicios para elegir una asamblea Constituyente. en los seis meses previos, sería presidente de la Generalitat y jefe de Estado, según la norma presentada el lunes por JxSí y la CUP.
En el mismo chat con ciudadanos, consideró que es "absolutamente indispensable" que una Cataluña independiente tenga ejército y política de defensa en un contexto de "combate global", como se ha visto con los atentados de Barcelona y Cambrils, informó Europa Press.
"Se necesita esfuerzo, se necesita inteligencia militar y recursos para hacer frente a los ataques de las guerras modernas", y Cataluña debe defenderse, y también sindicarse con otros ejércitos si es necesario, para combatir amenazas", argumentó.
También avisó de que Cataluña es un territorio expuesto a ataques: "No hemos de tener complejos, hemos de tener una política de defensa moderna, democrática y homologable a la de las naciones aliadas".
La proposición de ley de transitoriedad jurídica no hace referencia a un ejército, ya que deja la decisión en manos de la Asamblea Constituyente, si bien sus impulsores dejaron claro que el ejército español no tendría jurisdicción.
