La recta final de este mes de octubre está siendo agridulce para el ex diputado del PSOE, Narcís Serra. El que fuera alcalde de Barcelona durante los asños ochenta ha vuelto a la palestra informativa, y ha pasado de ser recordado por la histórica imagen junto con Pasqual Maragall por el 30 aniversario de la designación de Barcelona como sede de los Juegos Olímpicos de 1992, a que su rostro se vincule con su próxima visita al banquillo de los acusados.
La Audiencia de Barcelona ha avalado la decisión del juez instructor de enviar a juicio a los exdirectivos de CatalunyaCaixa (CX), Narcís Serra y Adolf Todó por los sobresueldos que cobraron a partir de 2010 "en perjuicio de los intereses de la entidad", mientras era sostenida con fondos públicos.
En un auto, consultado por Efe, la sección 21ª de la Audiencia desestima los recursos que presentó parte de la defensa contra el auto en que el juez instructor concluía que del caso desprendía suficientes indicios para enviar a juicio a Serra y Todó, por un delito de administración desleal.
Además de ambos directivos, la Audiencia seguirá el proceso penal, por el mismo delito, contra 40 miembros del consejo de administración de la entidad que aprobaron estas primas. La confirmación del auto abre el plazo para que la Fiscalía y las acusaciones personadas, entre las que figura la CUP, puedan presentar sus escritos de calificación, paso previo a que el juez les siente en el banquillo. La Fiscalía Anticorrupción denunció la subida de sueldos que se autoaplicaron los directivos de CX en 2010, pese a que la entidad estaba en una situación crítica que le obligó a pedir 1.250 millones al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob) y aplicar un ERE de 1.600 personas.
