PSC y Ciudadanos descartan la moción de censura contra Mas para frenar el 27-S
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, plantó ayer a la ministra de Fomento, Ana Pastor, durante el acto simbólico de colocación de la primera piedra de las obras del tren lanzadera que conectará el centro de Barcelona con la T1 del aeropuerto del Prat. El pasado lunes Colau se mostró molesta al enterarse por la prensa del comienzo de las obras, que Pastor anunció durante su visita a la factoría de Siemens en Cornellà (Barcelona). Al parecer, la alcaldesa no recibió la invitación formal hasta el martes.
Las obras de la lanzadera ferroviaria, que costarán 220 millones de euros, estaban paralizadas por falta de presupuesto y, tras largas negociaciones con la Generalitat y el exalcalde de Barcelona Xavier Trias, el Gobierno ha decidido desbloquearlas.
Colau considera que esta lanzadera no es prioritaria para Barcelona mientras que otras infraestructuras que dependen de Fomento si que lo son. "Hay cuestiones pendientes más urgentes y más prioritarias en materia de infraestructuras como los accesos ferroviarios al puerto, las inversiones en Cercanías o la estación de la Sagrera y el arreglo del entorno", considera la alcaldesa. Por su parte la ministra Pastor se mostró sorprendida por la actitud de la edil y recordó que Fomento está negociando con el ayuntamiento la ampliación de la Ronda Litoral a su paso por el puerto de Barcelona y el futuro de la estación de la Sagrera.
Según fuentes del gobierno de Colau, la alcaldesa confía en poder tener próximamente un encuentro con la ministra de Fomento para abordar las cuestiones pendientes que afectan a las dos administraciones.
Insultos en el 'Parlament'
Por otro lado, ayer se vivió una jornada muy tensa en el Parlamento catalán en el que el presidente catalán, Artur Mas, calificó de ignorante y de hooligan a los líderes de Ciudadanos, Albert Rivera, y del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, respectivamente.
Pese a la alta tensión parlamentaria, tanto el PSC como Ciudadanos han descartado apoyar la moción de censura contra Mas que había planteado Sánchez-Camacho para frenar las elecciones autonómicas del próximo 27 de septiembre. Según el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, los socialistas no quieren aplazar las elecciones catalanas pues afirman: "tenemos que salir de este callejón sin salida tan pronto como sea posible".
Por su parte, Inés Arrimadas, portavoz y candidata de C's, aseguró que su grupo "no contempla otra opción que la de que el próximo 27 de septiembre por fin haya elecciones autonómicas después de tantos años desperdiciados".