La Seda de Barcelona, en concurso de acreedores desde el pasado mes de julio, ha presentado un convenio de acreedores que contempla quitas de entre el 75 y el 86 por ciento y una ampliación de capital de entre 40 y 100 millones de euros.
La compañía, cuyo pasivo supera los 900 millones, comunicó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que la propuesta de convenio ya ha recibido el visto bueno del 25,2 por ciento de la masa pasiva, y que se hará extensiva al total del pasivo si representantes de más de un 50 por ciento del volumen que adeuda aceptan la propuesta, siempre y cuando el juzgado que instruye el concurso apruebe el plan.
El convenio ofrece a los acreedores una quita del 86,8 por ciento para aquellos que quieran cobrar de forma inmediata y otra de un 75 por ciento para los que estén dispuestos a cobrar en pagos diferidos durante ocho años y sin cobro de intereses. La dirección de La Seda considera que podrá hacer frente a estos pagos con los beneficios obtenidos por su división de envases en los próximos ocho años.
Otra parte del convenio establece que el principal accionista del grupo, BA PET, se compromete a cubrir una ampliación de capital de entre 40 y 100 millones que garantice la actividad diaria de la compañía. Para ello, BA PET otorgará un préstamo de forma inmediata condicionado al aumento de capital previsto. Una vez realizada la ampliación, la compañía devolvería el crédito otorgado.
Este es uno de los pasos más polémicos, ya que no está claro que el Registro Mercantil acepte que la junta de accionistas de la Seda pueda aprobar un aumento de capital por compensación de créditos antes de que dichos créditos existan. Por este motivo, la compañía ha solicitado autorización al Registro.
El tipo de interés que aplicará BA PET al hipotético préstamo sería del euribor a 3 tres meses más un 3 por ciento.
El plan de viabilidad de la compañía pasa por mantener su división de envases, la más rentable, y prescindir de la química, lo que supondrá la venta de las plantas de El Prat de Barcelona y de Iqua en Tarragona, para lo que ya ha pedido permiso al juez que instruye el concurso.