El Ejecutivo catalán ha aprobado este martes la rebaja del tipo impositivo a los casinos del 55 al 10 por ciento para dar cobertura legal al complejo de ocio BCN World proyectado en Tarragona. La rebaja tiene también intención de favorecer la competividad de Cataluña en relación a otros países donde la carga impositiva es similar. Según el portavoz Francesc Homs, la medida está pensada para potenciar la "dinamización económica del complejo".
El proyecto aprobado este martes, que ahora deberá superar el trámite parlamentario, incluye varias concesiones al promotor de ese macrocomplejo de ocio, el empresario Enrique Bañuelos, e ignora algunas recomendaciones hechas por el Consejo de Trabajo, Económico y Social, un organismo asesor del gobierno catalán.
La semana pasada este organismo, de carácter consultivo, cuestionó varias concesiones a los promotores de BCN World, y el gobierno apenas ha hecho cambios en el redactado final y avala que se puedan conceder licencias de juego en el área geográfica denominada Centro Recreativo y Turístico de Vilaseca-Salou (CRT).
La semana pasada el CTESC consideró, entre otros asuntos, que las concesiones fiscales impulsadas por Cataluña a los promotores de BCN World suponían un "agravio comparativo" y "competencia desleal" respecto a otros operadores de juego en la región, e incluso censuró la técnica jurídica elegida para encajar el proyecto, que ve "poco adecuada".
El CTESC, organismo que se dedica a asesorar al ejecutivo catalán en materia socioeconómica, laboral y ocupacional, y está formado por representantes de los sindicatos, de las patronales o bien por expertos.
Así pues, el gobierno catalán ha cumplido con las condiciones que pedía Bañuelos para empezar el proyecto, aunque ahora deberá buscar aliados en el Parlamento catalán para sacar el proyecto de ley adelante.
