
La Fundació Barcelona Comerç, que aúna al pequeño comercio de 16 ejes de la capital catalana, está dispuesta a abrir dos domingos más al año. De esta forma los tenderos aceptarían trabajar un máximo de 10 festivos al año, frente a los ocho actuales.
Esta nueva postura representa un pequeño punto de inflexión en el debate sobre los horarios comerciales en Barcelona, ya que la fundación siempre se había opuesto a ampliar el números de festivos frente a los grandes ejes comerciales del centro, como Barnacentre, Diagonal, La Rambla, Passeig de Gràcia o el Gremio de Hoteles.
Fundació Barcelona Comerç acepta abrir dos domingos más, aunque sólo una vez esté "consolidado" el proyecto de ley que tramita el Parlament para preservar el modelo comercial catalán, después de que el Estado recurriera el decreto ley catalán de horarios comerciales.
Cambiar festivos
También sugiere que se cambien de fecha algunos de los festivos autorizados por el Govern para abrir, como el 12 de octubre y el 1 de noviembre, por otros "más idóneos" para las necesidades del conjunto del comercio, por ejemeplo durante el Mobile World Congress.
Según el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, el comercio de proximidad es un sector clave para la recuperación económica de la ciudad y adelantó que "no tomaremos ninguna decisión sin su complicidad", en referencia a la flexibilización de los horarios comerciales.