La cervecera ahorra un 23% en el uso de electricidad y un 20% en el de agua en sus centros de producción catalanes
La política medioambiental de la cervecera Damm da sus frutos. La compañía catalana ha logrado reducir en los últimos años cinco años el consumo energético en sus fábricas catalanas gracias a la puesta en marcha de diversas iniciativas, que se han traducido en una reducción del 23 por ciento en el uso de electricidad, un 37 por ciento en el de calor y un 20 por ciento en el de agua.
La compañía ha invertido un total de 35 millones de euros en temas de optimización energética, de los que 25 millones se han destinado a la generación de energía renovable (fotovoltaica) o de cogeneración. Los diez millones de euros restantes se han ejecutado en otros programas adicionales en ahorro energético. Prueba de la importancia de estas políticas para la compañía es que cuenta con un departamento de optimización energética formado por 12 personas.
Placas fotovoltaicas
La compañía tiene instalados dos parques fotovoltaicos de 1,5 megavatios repartidos en su fábrica de El Prat y en el almacén de la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) de Barcelona. En concreto, en este último centro hay una potencia instalada de 819 kilovatios, la superficie que ocupan las placas es de 7.000 metros y se producen 1.270 megavatios anuales, que suponen el 43 por ciento del consumo de la ZAL.
Por su parte, en la fábrica de cervezas de El Prat, la potencia instalada de las placas es de 720 kilovatios y existen 6.000 metros cuadrados de placas instaladas. Aquí, sin embargo la producción es de 1.100 megavatios, que son sólo el 2,07 por ciento del consumo de la planta. Con estas medidas, la compañía dejó de emitir un total de 530.740 kilos de CO2 el pasado año. La empresa también emplea la tricogeneración mediante biogás (producido a partir del tratamiento de aguas residuales, que permite crear energía térmica, eléctrica y frigorífica). Sus políticas de eficiencia medioambiental ha sido reconocida por la Generalitat, que les ha concedido el Premio Medio Ambiente 2012. Este premio, que otorga la consejería de Territorio y Sostenibilidad, les reconoce su "trayectoria en protección y mejora del medio ambiente".
