La empresa inglesa Jarmac ha invertido dos millones de euros en la adquisición y reapertura de la planta de producción que la firma catalana Gralisa tiene en Cabrera de Mar. Gracias a esta operación se reabren las instalaciones de la catalana fabricante de triglicéridos naturales para usos técnicos que había suspendido su actividad en el 2009. Además, esta inversión supone la contratación de puestos de trabajo locales.
La firma inglesa proveedora de aditivos lubricantes para el sector químico y metalúrgico espera incrementar su cifra de negocio en los próximos dos años hasta los 13 millones de euros gracias a la adquisición de Gralisa, cifra que supone un 54 por ciento más que las ventas conseguidas en 2011. La empresa catalana prevé una facturación de 4,5 millones en el primer año tras la operación.
El director de Jarmac, Toby McEntyre, ha explicado que "Gralisa era un competidor nuestro con una buena reputación como productor de alta calidad". La nueva empresa prevé aumentar la producción y acceder a nuevos mercados: "la ubicación de la planta de Cabrera de Mar nos permitirá mejorar el servicio en el centro y sud de Europa, así como expandirnos hacia es este", ha destacado Toby.
Actualmente el 40 por ciento de las exportaciones de Jarmac Group se destina a Italia, seguido de Alemania y Francia. Turquía, India y China son los mercados en los que la firma prevé introducir sus productos próximamente.
Para esta operación Jarmac ha contado con el apoyo y asesoramiento del departamento de empresa y ocupación a través d'Invest in Catalonia, el área de promoción y atracción de inversiones.
