
Juan Ruiz, presidente y fundador de Wosh, expone en la revista Catalunya por qué su compañía está considerada como la 'lavandería y tintorería más innovadora del mundo' y cómo busca revolucionar el sector en toda España gracias a una propuesta basada en la digitalización y la sostenibilidad.
Volvemos a lo de siempre. Las startups que consiguen crecer y establecerse en el competitivo contexto empresarial actual son aquellas que parten con la misión de solucionar las necesidades de las personas. Todas las compañías que alcanzan el éxito, de una u otra forma, cumplen este principio, siempre y cuando esta solución sea sencilla y asequible.
Wosh es una de estas firmas, nacida en Barcelona con la misión de "ofrecer una solución para el lavado de la colada diaria con recogida y entrega a domicilio". Ruiz la define como "la lavandería online para las personas ocupadas en disfrutar de la vida".
Wosh ofrece servicio en toda España con su app y con locales a pie de calle, y llega con el aval del título de lavandería y tintorería 'más innovadora del mundo', según Cinet, ganando este reconocimiento en 2020 de entre más de 150 proyectos de más de 40 países. "Nos gusta decir que somos un mix entre el mundo online y el real", dice Ruiz, que matiza que "es online a través de nuestra aplicación móvil y real a través de nuestras franquicias de lavandería y tintorería".
El directivo explica que Wosh es innovadora en dos sentidos. "Hemos digitalizado un servicio muy tradicional", apunta, además de asegurar que "la revolución es también a nivel ecológico". Wosh usa el sistema de lavado basado en el wet cleaning, "un sistema 100% ecológico que hace que las prendas duren tres veces más y garantiza su desinfección".
De entre todas las bondades de este sistema de lavado destaca el abandono del percloroetileno, un disolvente líquido utilizado por casi todas las tintorerías tradicionales que es muy perjudicial para la salud de las personas ocasionando problemas como jaquecas o dermatitis.
En cuanto a su modelo de negocio, Wosh ofrece la opción de acudir a sus centros de lavado, abiertos en localizaciones como Burgos o Canarias a partir de franquicias, o a sus dos tiendas propias en Barcelona o Madrid.
Ruiz pone en valor a sus franquiciados y garantiza "un acompañamiento del equipo fundador al interesado en abrir una franquicia". La venta de franquicias es, de hecho, su negocio principal.
Por otro lado está el lavado a domicilio, con tarifas cerradas a pagar al mes para que se recoja la ropa una vez a la semana y sea devuelta limpia en un período de entre 48 a 72 horas según la zona geográfica del cliente. En las provincias donde Wosh cuenta con lavandería propia, Barcelona y Madrid, esta colada se gestiona con logística propia, mientras que en otras provincias algunos servicios no están disponibles, aunque el servicio base alcanza toda España. "Es un producto muy adictivo. La vida no puede ser trabajar toda la semana para el sábado poner una lavadora".
"La vida no puede ser trabajar toda la semana para el sábado poner una lavadora"
Wosh está en proceso de captación de un millón de euros para "continuar con la expansión a nivel nacional e iniciar el salto a Portugal. En cuatro años queremos más de 150 tiendas y 700 franquicias por toda España", dice Ruiz, que confirma que ya han conseguido 750.000 euros. "Nos quedan por cerrar 250.000 a través de una plataforma de crowdfunding. Cualquiera que quiera invertir, con una inversión mínima de 500 euros, puede hacerlo y ser socio de Wosh".