La empresa vallisoletana Hermi ha desarrollado una aplicación que permite controlar desde el móvil toda la actividad de las 35 granjas integradas.
Grupo Hermi revoluciona el sector nacional de la carne de conejo con la implantación de la "cunicultura 4.0" como instrumento clave del crecimiento y la mejora de la productividad. Para ello, ha desarrollado una aplicación única en el sector que facilitará el control de la actividad de las explotaciones a través del teléfono móvil, lo que permitirá a los cunicultores intercambiar información en tiempo real de manera fácil y sencilla.
La aplicación, que estará implantada a principios de 2017 en las 35 granjas integradas, servirá para recoger diariamente los datos de producción de las granjas, conocer el estado de la explotación, hacer pedidos de pienso y controlar los consumos, para poder analizar más ratios productivos. "Esta app nos hace pioneros y nos sitúa a las puertas de la cuarta revolución industrial: la cunicultura 4.0?, explica el consejero delegado de la compañía vallisoletana, Santiago Miguel.
Los datos se convertirán en información muy útil para los veterinarios, que podrán tomar decisiones de forma inmediata; y para los cunicultores, para contralar la evolución de sus producciones.
La "cunicultura 4.0" ha centrado la IV Jornada de Formación, que ha llevado a cabo Grupo Hermi hoy en la Escuela de Comercio de Valladolid, en la que han participado 60 profesionales de las 35 explotaciones integradas de la empresa. El objetivo es facilitar información sobre esta nueva aplicación, así como las ventajas de su uso para los ganaderos.
Grupo Hermi organiza estas jornadas para mejorar la formación de los promotores de las granjas de producción de conejos, que han permitido la incorporación de 37 jóvenes al sector agrario y la creación de 54 puestos de trabajo en el medio rural, que contribuyen a la fijación de población. "Hemos realizado la innovación necesaria para poder contar con las mejores instalaciones, la gestión de compra conjunta para conseguir los mejores precios para ellos, la intermediación con las entidades financieras para conseguir la financiación adecuada, en precio y plazo, para poder hacer realidad cada proyecto de inversión", precisó Miguel.
En la actualidad, las granjas están totalmente domotizadas, con sistemas de control ambiental que ponen en marcha la refrigeración o calefacción en función de determinados parámetros, que se contralan desde el ordenador.
Además, en breve contarán con un sistema de medición de los stocks de alimentos que cada granja tiene en los silos para controlar los consumos y fijar los niveles de pedido de manera automática. Una herramienta que han desarrollado en colaboración con la Universidad de Salamanca (USAL).