La cooperativa azucarera Acor ha aprobado este miércoles un beneficio de 8,6 millones en la campaña 2013-2014, lo que supone un descenso del 58 por ciento con respecto al ejercicio anterior, que se cerró con unas ganancias antes de impuestos de 20,4 millones.
El presidente de Acor, Carlos Rico, ha achacado este "fuerte descenso" en el nivel de beneficios al "derrumbamiento" de precios del sector azucarero, por encima del 40 por ciento, y la reducida producción final, lo que se ha traducido en un descenso de la facturación del 15 por ciento, al pasar de 200,5 millones a los 170,5 de esta campaña.
El presidente de Acor, Carlos Rico, ha apuntado que el acuerdo en la Unión Europea en 2013 para la reforma del sector azucarero comunitario, por el que la continuiad del régimen de cuotas irá solo hasta el 30 de septiembre de 2017, ha motivado una "situación convulsa" en el mercado azucarero comunitario, con unos precios en caída picada. A raíz de ello, las grandes industrias azucareras comunitarias están tomando posiciones comerciales muy agresivas en los mercados que "como el español" ofrecen más oportunidades para cubrir un consumo que se encuentra muy alejado de la producción local.
Pese a todo y gracia al incremento de la actividad en la planta de tratamiento de aceites y oleaginosas, la facturación de la cooperativa vallisoletana se ha mantenido por encima de la media de los últimos cinco años.
Carlos Rico ha garantizado la viabilidad de la cooperativa gracias al mayor peso de la actividad en las nuevas áreas de negocio, como la generación de energía eléctrica, los aceites y harinas y los servicios a terceros.
Para la actual campaña 2014-2015 remolachera la previsión es de rendimientos "históricos", tanto en España como en la UE, con un excedente fuera de cuota cercano a las 40.000 toneladas.
Además, la asamblea ha garantizado a los socios complemetar las ayudas acopladas hasta alcanzar un precio de 42 euros por tonelada de remolacha hasta 2020.