
Collosa pone el foco en 2015 y 2016 tras prever que este ejercicio será "plano" para la compañía por la caída de la licitación pública. La constructora espera facturar este año 79 millones de euros, 16 menos que en 2013, y aunque la cartera de negocio ha aumentado hasta los 140 millones de euros no empezará a tener efectos en la cuenta de resultados hasta más allá de diciembre.
La reactivación de las obras de mantenimiento de infraestructuras viarias, los proyectos de la interconexiones por gasoducto con Francia y Portugal y las obras de la Y vasca, son los frentes donde la compañía que preside Patricio Llorente pone el foco para recuperar actividad.
Junto a la obra civil -infraestructuras viarias, ferroviarias y gasísticas- , Collosa tiene en el sector de las renovables y en los servicios de ocio -gimnasios- sus principales líneas de negocio.
Patricio Llorente reivindica un impulso a la inversión pública. "En España necesitamos más trabajo sí o sí" para "la reindustrialización" que se quiere hacer. "La construcción también es industria y hay que contar con ella para la recuperación. Durante muchos años ha sido la locomotora económica y en estos momentos ni siquiera está enganchada al tren. Se han hecho muchas infraestructuras que hay que mantener. La inversión tiene que estar focalizada ahí", explica Patricio Llorente, entre otras razones, porque "puede poner a funcionar de un día para otro al capital humano y de estructura empresarial que está ahora improductivo".
Collosa, que recientemente ha concluido para Enagás el gasoducto que une la planta regasificadora de Bilbao (BBG) con el municipio de Treto (Cantabria), mira las posibilidades que se abren con la diversificación de suministro energético en Europa, un asunto que vuelve a estar encima de la mesa de la UE tras la crisis de Ucrania.
"España debe aprovechar la oportunidad que tiene en esa diversificación. En los últimos años hemos hecho muchas infraestructura y ahora toca ponerlas en valor con las interconexiones con Francia y Portugal. Estamos muy activos en ese tema", asegura.
Junto a la posibilidad de convertir a España en la puerta de entrada a Europa del gas que llega por barco, esta conexión con Francia permitiría a nuestro país aprovechar la energía sobrante que se generan con las renovables porque "puede convertirse en hidrógeno y ser transportado por esos gasoductos".
El responsable empresarial reconoce que ve con "interés que se explore el tema del fracking" aunque defiende el "rigor" la hora de abordarlo. Critica en este sentido que pese a que España cuenta con las garantías medioambientales de la UE "se esté cuestionando desde el principio".
Pone de ejemplo Estados Unidos, donde la fractura hidráulica ha permitido una rebaja sustancial de la factura energética que está haciendo que muchas empresas vuelvan a llevar la producción que ahora realizan en otros países.
"Muchas veces se publicitan las cosas malas en vez de las buenas. Parece que el medio ambiente sólo lo defienden los ecologistas, cuando empresas como Collosa fue un de las primeras que sacó la ISO 14000 y siempre hemos tenido sensibilidad con el medioambiente", dice el empresario.
Con la vista puesta en la conexión de alta velocidad con el País Vasco, Llorente reclama que se deje invertir a los ayuntamientos que no tienen deuda y pide un mayor esfuerzo de las Administraciones públicas en mantenimiento viario ante el repunte de la siniestralidad . "En Castilla y León ya toca que se invierta".