
La administración concursal de Coto Minero Cantábrico (CMC), que pertenecía a Victorino Alonso, ha adjudicado provisionalmente esta compañía minera a la sociedad Minera Astur Leonesa, propiedad del empresario Rodolfo Cachero.
La empresa se hará cargo de la explotación tanto de cielo abierto como de interior de Cerredo, en el concejo asturiano de Degaña, y asumirá a la totalidad de la plantilla, formada por unos 370 trabajadores, ha explicado a EFE el presidente del Comité de Empresa, Luis María Fernández (USO).
Los administradores concursarles han comunicado esta decisión a los representantes de los trabajadores en una reunión celebrada hoy en la que les ha explicado que una vez analizadas las dos ofertas con posibilidades de hacerse con los activos de CMC, la presentada por Minarsa y la de Minera Astur Leonesa, está última es " la que puede ser viable".
La adjudicataria, que presentó un plan de viabilidad hasta 2018, ha acordado con los trabajadores la unificación de todos los convenios bajo los que se rige la actividad de los operarios para integrarlos en el de Hullas del Coto Cortés, una de las antiguas empresas que forman parte de CMC, así como una rebaja salarial del 10% revisable en 2015 "siempre y cuando sea a la baja".
"Valoramos la operación porque de todos es conocido que nos encontrábamos en proceso de liquidación y en el momento en el que hay posibilidad de continuar, hay esperanza y expectativa", ha valorado Fernández, quien, no obstante, ha matizado que hay tener en cuenta la difícil situación del sector.
Asimismo, ha explicado que se quedan fuera de la adjudicación activos como los cielos abiertos y las minas de interior de Laciana, así como el cielo abierto de Toramaleo, en Asturias; unas instalaciones que saldrán de nuevo a subasta pública "por si hay otra oportunidad".
La adjudicación será definitiva en el plazo de "entre uno y tres meses", una vez que se firmen "algunos de los requisitos" y se pase a escritura pública.
Mientras se completa el proceso, los administradores concursales pondrán el cielo abierto de Cerredo a disposición de la empresa en concepto de arrendamiento "para comenzar a facturar ya".
"Somos conscientes de que con la adjudicación no se acaban los problemas, pero vamos a seguir peleando para sacar adelante el proyecto", ha concluido el sindicalista.