Las empresasfamiliares se mueven en busca de financiación. En plena sequía crediticia, con las cajas de ahorro pendientes de resolver sus problemas de capitalización y con las Administraciones Públicas sin recursos, estas compañías han decidido lanzarse a la búsqueda de capital para inyectar en el tejido productivo.
La Asociación Empresa Familiar de Castilla y León, que preside Gerardo Gutiérrez, ha dado ya los primeros pasos para crear un "club de inversores" que garantice la financiación de proyectos empresariales. Se trataría de una especie de fondo de capital riesgo o sociedad de inversiones que canalizaría el ahorro privado de los castellano y leones hacia proyectos que necesiten impulso financiero.
La asociación que preside Gerardo Gutiérrez Gutiérrez ha encargado ya un informe jurídico que determine las mejores fórmulas para arbitrar este nuevo instrumento, en el que la condición es que no participen las Administraciones Públicas.
El funcionamiento sería a través de dos evaluadores profesionales que se encargarían de dictaminar la conveniencia de participar en los proyectos que soliciten financiación "sean o no de empresarios familiares", según apuntaron a elEconomista fuentes de esta organización.
La iniciativa surge después de una consulta entre los empresarios asociados a EFCyL, que han visto con buenos ojos la propuesta y han mostrado su disposición a participar en este nuevo instrumento, que estaría abierto no sólo a los ahorros de los empresarios sino al de cualquier ciudadano que quiera invertir.
Fuentes de la asociación explicaron que los empresarios familiares son conscientes de las dificultades para lograr financiación a través de las fórmulas tradicionales, pero afirman que en la región hay ahorro privado suficiente "no sólo de empresarios sino de particulares".
El caso más claro de la falta de ausencia de instrumentos financieros es la sociedad de inversiones Madrigal, creada a instancias de la Junta por las cajas de ahorros y que ahora, los movimientos de fusiones en las cajas, ha dejado en encefalograma plano.
El presidente de EFCyL, Gerardo Gutiérrez, asegura que muchas empresas de la región "están al límite" por la sequía crediticia. Como ejemplo, cuenta que en los últimos meses se han dado de baja de la asociación 15 compañías, "de las que 10 ó 12 están en concurso de acreedores". Gutiérrez asegura que "los bancos no pueden dar dinero" y urge a un gran acuerdo para que las decisiones para mejorar la financiación "no dependan de los políticos". El dueño de la farmacéutica Gadea lo tiene claro: "No podemos estar parados".
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