El Plan Económico-Financiero de Castilla y León 2011-2013 contempla ahorrar un total de 969,7 millones de euros en el año 2011. Este trimestre, la Junta debe hacer frente a vencimientos de deuda de 183 millones.
La cifra es similar a la anunciada en junio de 2010 por el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, que habló de un ahorro de 1.000 millones de euros .
El mayor ahorro contemplado en este plan está situado en el capítulo de inversiones públicas, donde se fija un ajuste a la baja de 384 millones de euros, seguido de las trasferencias de capital, por 251 millones de euros.
Además, se estipula un ahorro de 197 millones en transferencias corrientes (103 en ayudas y subvenciones, 75 en gasto farmacéutico, 7 en universidades públicas, 6 en centros concertados educativos y otros 6 en fundaciones y restos de entes) y 129,5 millones en gastos de personal, donde el mayor ajuste se lo lleva la aplicación del decreto de reducción de retribuciones de empleados públicos, por 75 millones, seguido de la limitación del aumento de personal (40), las actuaciones reorganizativas del personal sanitario (12) y la reestructuración en el sector público regional (2,5).
Finalmente, se fija un ahorro de 8,2 millones de euros en gastos corrientes en bienes y servicios donde destacan los 2 millones por el fomento de la adquisición centralizada de bienes y servicios, 1,5 por la limitación de actuaciones de reparación, mantenimiento y conservación y otros 1,5 millones por la reducción de gastos por edición de publicaciones y material de oficina.
Otros 700.000 euros corresponden a la reducción de partidas destinadas a cubrir gastos discrecionales de protocolo, reuniones y conferencias mientras que 900.000 euros se pretenden ahorrar vía restricción de realización de estudios, trabajos técnicos y consultorías por empresas externas.
La Consejería de Hacienda tiene que hacer frente a vencimientos de deuda pública por valor de 183,4 millones de euros en este trimestre, lo que supone casi un 36 por ciento del total de la deuda cuyo plazo de amortización termina este año que se eleva a 511 millones de euros, según figura en el Plan Económico-Financiero de Castilla y León.
La Junta de Castilla y León estima que tendrá un endeudamiento nuevo en este año que llegará a los 1.138,4 millones de euros, mientras que en 2012, se elevará hasta los 1180,9 millones de euros, para reducirse ya en 2013 hasta los 1.090 millones. Ese año, la deuda será de 8.309 euros frente a la 4.899 de este ejercicio.
