
La futura tienda de Ikea en Valladolid, que abrirá sus puertas a finales de año, será "singular y única en España y en el mundo" al incorporar medidas medioambientales que permitirán reducir el consumo de energía en un 20 por ciento
Esto permitirá el ahorro de más de 100.000 euros anuales, que "repercutirá" en una "bajada de precios" y "no en un incremento de la cuenta de resultados·
Será la primera tienda de la multinacional sueca en contar con una iluminación integral de luces de LED y bombillas de bajo consumo, que permitirá un ahorro del 40 por ciento, y en estar libre de PVC, según anunciaron en Valladolid el responsable de Comunicación y Expansión de Ikea Ibérica, Rodrigo Sánchez Flórez, y la responsable de Sostenibilidad, Mercedes Gutiérrez, quien aseguró que lo aprendido en Valladolid se aplicará en los siguientes proyectos.
Todas las medidas medioambientales de la tienda tendrán un retorno de inversión de menos de ocho años, dijo matizó Gutiérrez, quien destacó el sistema de generación de energía de "trigeneración", desarrollado en colaboración con la Junta de Castilla y León y basado en la combustión de gas natural.
La energía generada por dicho sistema, que reduce de forma importante las emisiones a la atmósfera, cubrirá el 42 por ciento de la refrigeración de la tienda y el 73 por ciento de la calefacción. Además, generará 2.957 MWh, equivalente al 35 por ciento del consumo eléctrico anual de la tienda.
El nuevo centro de Arroyo también dispondrá de "lucernarios de alta eficiencia lumínica" en la zona del autoservicio, que permiten el paso de la luz pero no del calor, con un ahorro del 70 por ciento; un control de iluminación "por sectores", con sensores de presencia que ahorran entre el 20 y el 30 por ciento; y una instalación fotovoltaica en la cubierta superior, con 17.000 módulos que producirán 1.160 MW al año, lo que equivale al 25 por ciento del consumo anual total de energía de la tienda.
Entre las medidas de sostenibilidad también figura un circuito de climatización "inteligente", que cambiará la velocidad del aire en función de la afluencia de personas en una zona determinada, lo que ahorrará un 30 por ciento; y ventiladores de desestratificación, ubicados en el autoservicio, que lograrán temperaturas "más homogéneas" y un ahorro del 40 por ciento en calefacción.
Para los clientes, la tienda de Ikea en Arroyo ofrecerá gratuitamente 25 "electrolineras", o puntos de recarga de automóviles eléctricos; cisternas de doble descarga en los servicios, que ahorran un 20 por ciento de agua; y un punto de reciclaje de bombillas, pilas, embalajes y pequeños aparatos eléctricos. Además, la tienda separará los residuos en 14 tipos distintos, reutilizará el aceite de su restaurante en la fabricación de biodiesel y utilizará un nuevo tipo de palés de cartón reciclados, ya implantados en todos los centros de la multinacional sueca, que permiten un ahorro mundial de 16 millones de euros.
Todas estas medidas se enmarcan en un plan estratégico de la compañía diseñado hasta 2015, con el que ésta pretende que su surtido de productos a la venta "sea más sostenible", concretamente un 90 por ciento más dentro de cuatro años; tener un ?papel activo? en la lucha contra el cambio climático; convertir los residuos en materias primas, reducir el consumo de agua tanto en tiendas como en proveedores y avanzar en responsabilidad social para que Ikea sea "la mejor empresa para trabajar en distribución en España", aseguró la responsable de Sostenibilidad.
Para terminar, Mercedes Gutiérrez matizó que el cliente percibirá todas estas acciones en unos embalajes planos más inteligentes y en una mejora de las materias primas, con un algodón más sostenible y una madera certificada y sometida a "un control minucioso" que garantiza su trazabilidad.