
La consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, ha pedido que se cancelen todas las cabalgatas o actos navideños que estén previstos y que se limiten las reuniones a sólo convivientes para evitar la expansión del virus en la Comunidad ante un importante incremento de casos en los últimos días.
Casado ha hecho este llamamiento en la rueda de prensa semanal en la que analiza la evolución de la pandemia y ha insistido en que la situación actual es "grave" ante un crecimiento importante de las tasas de contagio.
"Hay que frenar esta tercera ola que se inicia porque podría desbordar el sistema sanitario", ha advertido la consejera, quien ha insistido en que lo más urgente es pedir a los ayuntamientos que cancelen todas las cabalgatas, por lo que ha recomendado a la ciudadanía que se sigan oline o por televisión.
Además ha insistido en limitar las reuniones en Reyes a sólo convivientes y ha pedido que se evite el contacto entre niños y población de riesgo.
"Está subiendo sola la incidencia acumulada, es importante volver a reiterar la necesidad de confinamiento inteligente a todos los ciudadanos, legalmente no podemos obligar a que se queden en sus casas, pero sí recomendar que lo hagan, que se junten lo mínimo, limiten la actividad social", ha aseverado.
Casado ha revelado que el Comité de Expertos de Castilla y León que trabajan ante la pandemia generada por el Covd-19 han emitido un informe en el que señalan que un confinamiento domiciliario estricto en este momento sería lo más adecuado para frenar el nivel de contagios, por lo que la Junta volverá a pedir en el Consejo Interterritorial de Salud herramientas jurídicas que permitan a las comunidades acometer esta medida.
"Ellos plantean el confinamiento domiciliario estricto durante dos semanas", ha aseverado Casado, quien ha insistido en que la Comunidad no tiene "ni competencia ni capacidad" para acometer esta medida, ya que el Estado de Alarma aprobado por el Gobierno sólo contempla la posibilidad de que las autonomías establezcan el toque de queda, limitación de reuniones, cierres perimetrales y control de aforos.
Para la consejera, dada la evolución epidemiológica actual, ahora sería el mejor momento para imponer un confinamiento estricto de entre 10 y 14 días para frenar la curva ascendente de contagios que, en este momento, es "rápida" y que lleva a "duplicar casos" en uno o dos días.