La compañía de componentes de automoción esquivó el pasado año la crisis del automóvil en Europa y cerró 2019 con una facturación prácticamente similar al del año anterior, 114 millones de euros.
Lingotes Especiales contabilizó un beneficio antes de impuestos de 11,43 millones de euros en el conjunto de 2019, lo que representa una disminución del 6,4% en la comparativa con el año previo (12,22 millones de euros).
Según informó la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valortes (CNMV), los ingresos anuales se situaron en 114,39 millones de euros, un 0,4% de disminución en comparación con los 114,89 millones de euros facturados en 2018.
La compañía atribuye esta ligera caída a la caída significativa de la producción de automóviles en países como Alemania, Italia ó Reino Unido. Lingotes Especiales exporta el 79 por ciento de su producción.
La compañía registró un beneficio bruto de explotación (Ebitda) de 17,12 millones de euros al término del ejercicio pasado, lo que se traduce en una bajada del 5,3% respecto a los datos contabilizados el ejercicio anterior.
En 2019, Lingotes Especiales invirtió 7,63 millones de euros, un 31,6% de descenso respecto a los 11,17 millones de euros destinados a esta partida en 2018. Entre 2015 y 2019, la inversión media se ha situado en 9,48 millones de euros.
Precisamente las fuertes inversiones realizadas ha permitido a Lingotes Especiales el incremento de productos nuevos, "que son los que garantizarán la actividad del futuro".
Para la compañía presidida por Vicente Garrido Capa el ligero descenso del resultado de explotación se ha debido al alto precio de la energía en España "que no es admitido por los clientes, sobre todo extranjeros, pues en otros países esta circunstancia no se da, por lo que el diferencial del margen ha tenido que ser soportado" por la empresa.