
La familia más poderosa del tomate en Canarias cambia de ciclo. El descenso de ayudas al transporte por el Brexit, la competencia de Marruecos y los cambios de hábitos en el consumo ha generado que la familia Rodríguez Quintana haya optado finalmente por destinar su suelo al negocio del turismo de alta capacidad de gasto. Son 1.200 millones de euros para un total de 900 camas hoteleras, es decir, menos que el hotel Costa Meloneras de Lopesan. Para ello, se ha asociado con el grupo nórdico Kokoon. La Aldea en Canarias es es el 'West Point' de la política regional: pocos habitantes pero manejan un poder omnímodo hasta el punto que el vicepresidente y tesorero del Gobierno de Canarias, Román Rodríguez, es de allí.
El arquitecto de la familia, Ignacio Rodríguez Plaza, explicó este martes a El Economista que la empresa va a dar un giro para generar empleo y dar salida al problema que surge por el descenso del turismo de masas en las islas y la reducción de mercado tomatero en La Aldea de San Nicolás. Apuntó que los 11.000 puestos de empleo previstos no requerirán la creación de parque de viviendas para trabajadores porque en el municipio hay suficientes casas para atender a la demanda de mano de obra. Explicó que es un proyecto a largo plazo y que no es para un escenario a corto plazo.
El alcalde del municipio, el socialista Tomás Pérez, dijo en 2018 que la localidad "no cierra las puertas a nadie que quiera participar en su desarrollo económico y turístico". Pero en 2021 se ha amulado porque no la empresa promotora ha iniciado la presentación del proyecto financiero sin presentar antes la solicitud de licencia. Quien conozca las matemáticas de relaciones del poder en las islas la ecuación es la siguiente: nacionalistas, PP y PSOE a favor del proyecto; pero ciertas terminales del PSOE están en contra. La concejal de Urbanismo ha pedido a Kokoon cierta prudencia a la hora de explicar sus planes.
El ingeniero local Ignacio Rodríguez ya registró en 2018 el proyecto para que autoridades y opinión pública local lo conociera.
El arquitecto jefe de la familia Rodríguez Quintana explicó que ellos aportarían hasta el 30% del suelo a Kokoon La Aldea para lanzar a largo plazo un hospital con 400 camas, dos lujosos hoteles de 7 estrellas con más de 400 suites, espacios deportivos "y un impacto medioambiental mínimo". El consejero delegado del grupo Kyrre Gulbrandsen, consejero delegado, procede de AEG y la antigua Statoil.
La historia de los Rodríguez Quintana
Tomás Rodríguez Quintana inició el negocio industrial del empaquetado de tomates de La Adea en 1950 con la compra de 168 fanegadas. Ya en 1966 exportaban al Reino Unido 1,7 millones de kilos de tomates y a lo que se sumó berenjenas y pepinos dando empleo a más de 200 familias, mayormente procedentes de Agaete. Fue entonces cuando hubo que construir infraviviendas para dar empleo a tanta gente en aquel árido espacio del que se nutria buena parte de los supermercados británicos de la posguerra mundial. Las exportaciones tomateras del archipiélago han descendido de las 305.000 toneladas a poco más de 42.000 toneladas en los últimos 20 años
Los Rodríguez Quintana siguieron creciendo en suelo comprando a José Verdugo a partir de los Sesenta y debían hacerse cargo ya entonces de la educación de los escolares, enseñanza secundaria y pagar la universidad a los hijos de los trabajadores de las fincas de Furel-Sabinar, Las Tabladas, El Barranquillo de La Plaza, El Pinillo y Playa de Tasarte.