Crea el proyecto 'Mujer e Ingeniería' para despertar su interés por estos estudios, apoyar su incorporación profesional y su promoción a puestos de responsabilidad
Las TIC (tecnología, información y comunicación) son la gran promesa laboral para Europa. El sector reclama formación ad hoc urgente para cubrir el millón de empleos que necesitará el Viejo Contienente en 2020. La demanda de carreras técnicas en los últimos diez años ha descendido un 25 por ciento y las mujeres están poco están poco presentes en estas titulaciones.
'Mujer Ingeniera'
Por ello, la Real Academia de Ingeniería (RAI) ha presentado un gran proyecto: Mujer e Ingeniería, para despertar el interés de niñas y jóvenes por los estudios de ingeniería y arquitectura, acompañarlas y apoyar su incorporación a este entorno profesional, así como motivarlas en su promoción hasta puestos de responsabilidad y alta dirección.
Al frente de Mujer e Ingeniería está la doctora ingeniera Sara Gómez, profesora de la Universidad Politécnica de Madrid. Así, Gómez indica que "la evolución del número de estudiantes que opta por cursar estudios de ingeniería ha ido disminuyendo en los últimos 10 ó 12 años, sin distinción de género. Por ramas, la presencia de las mujeres en la ingeniería es dispar. En estudios como Bioingeniería o Ingeniería biomédica está alrededor del 50 por ciento, cifra similar al de algunas especialidades, como la ingeniería agronómica. Su presencia también es razonable en la ingeniería química, de organización y de diseño industrial. No ocurre lo mismo en las ingenierías aeronáuticas, en algunas ramas de la ingeniería industrial (mecánica, electricidad, electrónica), o en la ingeniería de caminos o de minas; en estas titulaciones están entre un 25 y un 30 por ciento. En el caso de las ingenierías de telecomunicaciones o informática, su presencia desciende al 10-12 por ciento".
La iniciativa cuenta con un vídeo grabado por niñas, estudiantes y profesionales de la ingeniería que se utilizará en colegios e institutos para motivar a las estudiantes y desterrar la idea de que las mujeres con vocación por esas áreas son "bichos raros" o "frikis".
Entre las numerosas actividades que contempla el proyecto Mujer e Ingeniería, se ha diseñado un programa de mentoring. Empezará en la Universidad Politécnica de Madrid y en la Universidad Carlos III de Madrid, para ir extendiéndose a otros centros y escuelas politécnicas del país. Su lanzamiento será a mediados de este mes de noviembre. También cuentan con actividades en colegios e institutos, donde habrá además charlas de concienciación para padres, formación para profesores, etc. Estas acciones empezarán en nueve centros de la Comunidad de Madrid, para ir extendiéndose a otras comunidades autónomas.
ENTREVISTA CON SARA GÓMEZ
¿Por qué hay esa aversión a estudiar carreras de números, sobre todo en España?
En mi opinión este no es solo un problema de España, en Europa y en Estados Unidos, hay falta de vocaciones en ciencias y en ingeniería, de hecho estos países llevan años trabajando en iniciativas similares, para fomentar el interés de niños/as y jóvenes en este tipo de estudios.
Las causas del porqué estas carreras no son una opción mayoritaria para las niñas y jóvenes son múltiples. Sin duda hay factores culturales, sociales e históricos, pero también creemos que la falta de referentes femeninos en ingeniería, la influencia de los padres y profesores en los niveles previos a la enseñanza superior, el no poner en valor la vertiente social que tiene la ingeniería, entre otros, son algunos de ellos.
También la metodología docente con la se enseñan estas materias, muy teoría y poco práctica puede no favorecer el interés de los estudiantes por ellas.
¿Por qué necesitamos proyectos como éste?
Porque tenemos que trasladar la importancia y lo que aportan las ciencias y las ingenierías al desarrollo de los países. ?Una sociedad sin ingeniería y sin ciencia, es una sociedad sin progreso?. Porque son la mejor palanca de transformación positiva y multiplicadora de desarrollo?. Porque tenemos que invertir la tendencia, hay que convencer a las niñas y jóvenes que la ingeniería les va a brindar una excelente oportunidad de desarrollarse personal y profesionalmente.
¿Cómo se fomentan las vocaciones entre las más jóvenes?
Mostrándoles qué es la ingeniería, qué hacemos los ingenieros, que pueden aportar a la sociedad si cursan estudios de este tipo. Rompiendo estereotipos tan falsos como perjudiciales, mostrando a mujeres ingenieras consolidadas que trasladen su experiencia, que sean referentes?
¿En qué edades hay que incidir?
En edades muy tempranas, quizá desde la educación infantil y, por supuesto, en primaria, secundaria y bachillerato. Nuestros niños están rodeados de tecnología desde que nacen y han de saber quiénes hacen posible que esto sea así.
El techo de cristal en la universidad está muy presente. ¿Cómo se puede evitar? ¿Qué se tiene que hacer?
No comparto que el techo de cristal esté presente en la universidad, en mi opinión, el techo de cristal es una realidad social que aflora especialmente en el periodo profesional de las mujeres, no en el periodo de formación.
Muchas de las acciones del proyecto van encaminadas a acabar con ese techo de cristal, por ejemplo, el acompañamiento de las ingenieras jóvenes en el momento de empezar su vida profesional, en su recorrido para favorecer que alcancen puestos de responsabilidad, para que rompan ese techo y opten a puestos directivos. Animándolas a ser y ejercer como líderes tecnológicas.