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Naturgy: los gases renovables al servicio de la descarbonización

  • Naturgy está inmersa en una gran transformación con el compromiso estratégico de alcanzar una solución equilibrada al trilema energético: contribuir a la descarbonización de la economía, asegurar la seguridad de suministro y mantener un precio asequible de la energía para todos los consumidores.
Planta Edar de Bens, de producción propia de biometano, en A Coruña
EcoBrands

El sistema gasista español es flexible, moderno y está preparado para la descarbonización, por lo que las redes de gas deben ocupar un rol central en la planificación para una transición energética que resuelva este "trilema energético". Es este sentido, la inversión en gases renovables nos acerca a una energía más limpia, segura y asequible.

El gas renovable se obtiene a partir del tratamiento de los residuos urbanos, agrícolas, ganaderos y de la industria agroalimentaria, así como de la depuración de las aguas residuales. Son gases procedentes de fuentes renovables, por lo que no generan emisiones contaminantes. Por ello, su desarrollo es clave para la descarbonización del sector energético y de la economía. Los gases renovables son principalmente el biometano y el hidrógeno verde.

Naturgy quiere liderar el impulso de los gases renovables en España tanto en la producción y distribución de biometano en el corto plazo, como en el desarrollo del hidrógeno como vector energético que tendrá un impacto significativo en el mix energético a medio plazo. La compañía está bien posicionada para aprovechar la oportunidad que ofrecen los gases renovables para avanzar hacia la descarbonización y está dispuesta a desplegar importantes inversiones y recursos en este negocio.

España es el tercer país europeo con mayor potencial de producción de biometano. Según un estudio de Sedigas, se estima en 163 TWh/a: con este potencial podríamos suministrar con biometano el equivalente al 40% de la demanda nacional de gas natural. Al mismo tiempo, permitiría ahorrar la emisión de 8,3 millones de toneladas de metano que, de otra manera, se liberarían a la atmósfera por la descomposición de los residuos reutilizados para generarlo. Además, desarrollar el potencial de biometano en España supondría un ahorro de hasta 4.000 millones de euros para los consumidores por la reducción de las compras a países terceros.

Planta Elena, de producción propia de biometano, en Cerdanyola del Vallès
Planta Elena, de producción propia de biometano, en Cerdanyola del Vallès

El reciente borrador del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) ha duplicado el objetivo de producción de gases renovables hasta los 20 TWh/año en 2030, lo que demuestra su importante papel en la transición energética. Pero España, a pesar de su enorme potencial, acumula un notable retraso en la producción y consumo de este gas renovable frente a otros países europeos como Francia o Dinamarca. Francia tiene más de 400 planta en operación, Alemania más de 200 y Reino Unido más de 100.

Y es que el biometano se perfila como una de las grandes claves en la reducción de emisiones, ya que, al tener cualidades similares al gas natural, puede distribuirse a través de la infraestructura gasista existente y emplearse en hogares, industrias, comercios y también para movilidad en el transporte. Hoy en día todas las calderas están preparadas para funcionar al 100% con biometano sin necesidad de ninguna inversión: la caldera de condensación con biometano es la mejor y más barata forma de descarbonizar los hogares. Además, el biometano ya puede circular por la actual infraestructura de gas natural, eje vertebrador de la descarbonización en el hogar.

El gas renovable está llamado a jugar un papel central en la transición energética en España: nos permitirá diversificar fuentes de energía y aumentar la autonomía energética, puesto que las fuentes renovables tienen su origen en el país. Además, son fáciles de almacenar, una flexibilidad que no tienen otras energías.

El biometano lleva más de 50 años entre nosotros. Este gas renovable es ya es una tecnología madura, asequible y almacenable que contribuye a dar estabilidad y capacidad de almacenamiento al sistema eléctrico. Además, el biometano es una fuente de energía limpia y autóctona, que contribuye a asegurar la garantía de suministro, a reducir la factura exterior en la balanza comercial y a reducir los problemas de la gestión de residuos.

El desarrollo del biometano permitiría la creación de empleo y el desarrollo de las zonas rurales. Adicionalmente, promueve la economía circular con la optimización de los residuos, puesto que los residuos ganaderos y agrícolas son una de las principales materias primas para su producción. Además, los fertilizantes orgánicos son otro producto generado en el proceso, completando el ciclo de la economía circular. Y el despliegue de este enorme potencial, no solo aportaría una gran riqueza a la economía, sino que contribuiría a solucionar dos grandes desafíos: la gestión eficiente de los residuos y el reto demográfico.

Naturgy tiene una decidida apuesta por innovar para hacer realidad el gas renovable. La compañía tiene un modelo de desarrollo basado en la colaboración multisectorial y las alianzas. Naturgy cuenta con tres plantas de producción propia (una en Galicia y dos en Cataluña) que actualmente están inyectando biometano en la red, y sumará en los próximos meses dos nuevas instalaciones de biometano en Valencia y Sevilla. Con estas cinco plantas Naturgy contará con un total de 104 GWh anuales de producción de biometano.

Además, Nedgia, la distribuidora de gas del Grupo, está jugando también un papel estratégico en el despliegue de los gases renovables a través de una infraestructura gasista compuesta por una red de más de 57.000 kilómetros presente en 1.150 municipios.

El biometano es la alternativa de descarbonización más sostenible medioambiental, económica y socialmente, porque significa emisiones netas negativas, economía circular y reducción de residuos. La confiabilidad, adaptabilidad, impacto ambiental, universalización de su uso y las contribuciones económicas convierten al biometano en un elemento vital para un futuro próspero con una energía más sostenible y segura.

Producido por EcoBrands.