Trabajar la empleabilidad y el emprendimiento desde edades tempranas ayudará a los alumnos en el desempeño de su carrera profesional y laboral. Y es que para aportar valor en el desarrollo de las actividades económicas es necesario una formación que conste de conocimiento, actitud, competencias y comportamiento.
¿Se debe comenzar a trabajar la empleabilidad de los alumnos en el colegio?
El enfoque de trabajar la empleabilidad en los alumnos a partir de los 15 o 16 años, novedoso y poco común en España, es una estrategia clave para preparar a los jóvenes en su futuro laboral. En esta etapa, tradicionalmente, la educación ha estado más centrada en la adquisición de conocimientos. Las iniciativas sobre empleabilidad actualmente se han enfocado en etapas educativas más avanzadas, procurando fomentar un espíritu emprendedor desde una perspectiva curricular transversal, resultado también del trabajo realizado a través de competencias y habilidades relacionadas en edades más tempranas.
¿A partir de qué edad es el momento idóneo para trabajar este aspecto?
En nuestro colegio, este motor de emprendimiento encuentra sus primeras respuestas desde la educación Primaria y la ESO, a través de propuestas didácticas en las que los alumnos desarrollan ese espíritu desde la imaginación y la búsqueda de información adecuadas a esa etapa formativa. Y es en 4º de ESO y Bachillerato cuando los estudiantes están en un proceso crucial de toma de decisiones sobre sus estudios, por lo que es importante brindarles herramientas y experiencias que les permitan entender las expectativas del mercado laboral. Por esta razón, la introducción de programas de empleabilidad y emprendimiento en estos niveles representa una novedad significativa.
¿Cómo trabajáis la empleabilidad y el emprendimiento durante la escolarización obligatoria?
El Proyecto Acompaña, desarrollado al final de la etapa de secundaria, es una iniciativa valiosa. En su naturaleza está la propia del colegio puesto que, desde la reciprocidad formativa, involucra a las familias para que muestren a los estudiantes la realidad de diferentes profesiones. Es un proyecto de inmersión laboral que cuenta con el "acompañamiento" de los padres implicados a través de un proceso de selección e información desde el colegio. Ahí se inicia la actitud deseada en el alumno, consciente de que ha de valorar sus destrezas, aptitudes, afinidades y posibilidades de futuro laboral. Además, la cercanía y generosidad de las familias ayuda a los alumnos a comprender mejor las demandas y necesidades de los empleadores, así como a identificar las áreas de formación que deben priorizar para ser competitivos en el futuro. CEU Emprende constituye otro de los pilares formativos. Destinado también a 4º de ESO, su origen está en nuestro interés por abrir un puente entre Colegio y Universidad, conscientes de que es esta institución la que nos podía facilitar los medios y recursos necesarios para que los alumnos con potencial emprendedor pudieran desarrollarlo con éxito. Además, CEU Emprende pone el acento en la responsabilidad social y fomenta el emprendimiento social en colaboración con ONGs y fundaciones con fines sociales. Este programa se desarrolla desde la tutela de profesores especializados en emprendimiento universitario y con la colaboración de mentores cuyos proyectos empresariales sirven de modelo. El objetivo final es participar en el concurso Teens emprendedores en el que los alumnos seleccionados han de presentar y defender una iniciativa empresarial desarrollada a lo largo de los meses de trabajo del proyecto.
¿Y de cara a los estudiantes de Bachillerato?
En los niveles de Bachillerato, se apuesta por dos programas ambiciosos que conectan el ámbito escolar con un grupo de empresas de renombre dentro del tejido empresarial valenciano y, además, con el entorno universitario. Por una parte, el CEU Inschool University Diploma (CIUD) es el primer diploma universitario para alumnos de Bachillerato que, además, plantea prácticas en empresas para los estudiantes participantes. Un programa disruptivo porque, por primera vez, la Universidad, consultores expertos en innovación y la empresa se acercan al talento joven de los colegios para abordar retos sociales de nuestro entorno y trabajar en equipo con ellos. Los resultados que los alumnos presentan muestran soluciones a los retos planteados que son valoradas por todas las empresas participantes para, incluso, desarrollarlas posteriormente. Por último, el proyecto Generación Brillante se centra en un espacio de interacción entre estudiantes, directivos, ejecutivos y titulares de empresas. Les permite a los jóvenes conocer de primera mano las expectativas que las organizaciones tienen en el mundo laboral actual y cómo pueden adaptarse a él.
¿Qué formación ofrecen estos proyectos?
En conjunto, estos proyectos brindan una formación integral, no sólo conocimientos técnicos, sino también desarrollan habilidades interpersonales y sociales que facilitan la interacción efectiva con los demás. Algunas de ellas incluyen la comunicación, el trabajo en equipo; la resolución de problemas y la empatía. Todo ello, junto con la adaptación a las exigencias del mercado y una ineludible vocación de servicio, son elementos esenciales para asegurar el éxito profesional de los estudiantes en un entorno laboral competitivo y cambiante.