Desde su inicio, la labor educativa de "Estudio" se centra en ampliar horizontes, adoptar y promover un compromiso personal para desarrollar las capacidades y valores de sus alumnos. Gracias a ser una institución sin ánimo de lucro, el foco fundamental, del día a día, está situado en proporcionar una educación de calidad a los alumnos con una atención individualizada.
La necesidad de que el aprendizaje sea integral ha llevado a "Estudio" a contemplar una educación global donde se concede mucha importancia a todas las esferas del saber vinculadas por el asombro y la curiosidad que debe despertar a los niños a esos aprendizajes. Por ello dan importancia al movimiento, a la educación física, al teatro, al trabajo manual, al juego libre de los niños en el que construyen, crean, observan y dan sentido a lo que ven. Jimena Menéndez Pidal, fundadora de "Estudio" defendía que "Lo esencial es potenciar el desarrollo de la mente, el enriquecimiento de la persona, la capacidad de integración en lo social y la facultad de adaptación a cambios imprevisibles del futuro en el que, en aceleración vertiginosa, deben estar imbricados humanidades, ciencia y tecnología."
En "Estudio" el aprendizaje se construye a través de la propia experiencia, la curiosidad, la creatividad y el esfuerzo por el trabajo bien hecho como defendía Manuel B. Cossío, "a hacer, solo se aprende haciendo". El conocimiento se comprende de forma global, las artes, las humanidades y las ciencias se combinan con las destrezas de las manos, la sensibilidad estética y el cultivo de la salud.
Los alumnos elaboran sus propios materiales, cuadernos y ficheros que les ayudan a desarrollar habilidades como ordenar, clasificar, encuadernar, numerar, o trabajar el gusto estético. Esta forma de aprendizaje exige comprensión de los contenidos, capacidad de resumir, identificación de la información esencial, comparación, esfuerzo de atención, búsqueda de información complementaria, elaboración de dibujos, mapas y reproducciones de edificios u obras de arte para ilustrar el contenido.
Esto implica que los alumnos del colegio cultiven un modo singular de contemplar e interpretar los paisajes muy ligado, por ejemplo, a la literatura. Una mirada propia ante su entorno, como la sierra de Guadarrama, los paisajes cercanos a la ciudad de Cuenca, las marismas de Doñana o los campos de Castilla. "El paisaje, explicará Ortega, es aquello del mundo que existe realmente para cada individuo". La emoción que surge de este contacto literario con el paisaje perdura para siempre si es cultivado desde la infancia.
Para cultivar esa mirada los profesores ponen en contacto a los alumnos con textos referentes y esenciales de nuestra cultura y los guían en la comprensión de su significado. Desde los primeros cursos se adentran en ese tesoro de imágenes, descripciones y sentimientos que recoge la literatura para aprender a valorar nuestro patrimonio cultural. Porque se aprende a valorar la cultura y el entorno a través del apego que sentimos con ese patrimonio y ello nos llevará a su cuidado y respeto. "El arte regala valores, otorga dotes a los paisajes. No es lo mismo Soria sin Machado que con él. Además, como escribía Julián Marías, en los paisajes no sólo se está, sino que se vive." señala Eduardo Martínez de Pisón.
Por ejemplo, los alumnos conocen la flora y fauna del entorno en las diversas visitas y excursiones por múltiples espacios de la geografía española o comprenden los principios de la ingeniería con la visita a un puente en Madrid y la posterior creación de una maqueta o para explicar cómo son los reptiles y los anfibios en la clase X (5º Primaria) se organiza un taller en el colegio en el que los niños los observan de cerca, conocen y sienten la naturaleza para vincularse con ella y cuidarla.
M. Bartolomé Cossío defendía que el niño "posee todo lo necesario para ver, primera e ineludible condición del conocimiento; solo aguarda que le enseñen a hacerlo." Y sostiene, además, que "el mundo entero debe ser, desde el primer instante, objeto de atención y materia de aprendizaje para el niño".
Esta manera de aprender y de integrar las ciencias, las artes y las humanidades está presente en los dos centros educativos "Estudio", en la sede de "Estudio" de Valdemarín en Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato y en la sede de Conde Orgaz en Infantil, Primaria y Secundaria.
Ambos colegios son espacios donde tienen lugar experiencias significativas, como los trabajos o proyectos que elaboran los alumnos, donde los mayores comparten el conocimiento con los alumnos pequeños en los laboratorios o en las actividades que integran a alumnos de las diferentes etapas. Un valor fundamental, en los tiempos presentes y que en "Estudio" se fomenta de forma destacada es el aprendizaje con sosiego, con la calma que permite reflexionar e integrar lo aprendido para tener una actitud crítica hacia la realidad y hacia nosotros mismos. Por ello, se fomentan valores como el respeto, el rigor en el trabajo, el esfuerzo personal y la responsabilidad para lograr los objetivos y ser personas independientes, responsables y comprometidas.
En Bachillerato imparten las modalidades de Ciencias y Tecnología, Humanidades y Ciencias Sociales y Artes. Se facilita que todos los alumnos configuren sus itinerarios de la manera más personalizada posible y existe un programa de orientación profesional en Bachillerato con visitas a instituciones y empresas, así como charlas especializadas impartidas en el propio centro por expertos de diferentes ámbitos. Además, desde Secundaria se promueven viajes e intercambios internacionales a Bruselas, Washington, París, Roma, Glastonbury, México o Copenhague. Además, en el colegio se presta especial atención a brindar todas las oportunidades posibles a los alumnos ofreciendo la información y ayuda en la gestión de becas en el extranjero y la orientación universitaria y profesional.
"Estudio" conjuga la formación integral con la excelencia académica. La media de notas del Acceso a la Universidad de los últimos cinco años (junio) es de un 99% de alumnos aptos sobre un 98% de alumnos presentados. En junio de 2023, un 100% de aprobados y una calificación media de acceso a la universidad de 7,6 (sobre 10) en la fase general de la EvAU y de 11,09 (sobre 14) con la fase específica, lo que les brida excelentes oportunidades para estudiar en universidades españolas y extranjeras. El colegio es, además, centro examinador de Cambridge, pruebas en las que los alumnos destacan con notas excelentes.
Para llevar a cabo este proyecto pedagógico es fundamental comprender que la Fundación Estudio es una institución privada, laica y sin ánimo de lucro que invierte todos sus recursos en la mejora de su modelo pedagógico. Y por ello están convencidos, y su experiencia así lo avala, que este modelo pedagógico basado en el aprendizaje activo, experiencial e integral es la mejor forma de generar aprendizajes significativos a través de la propia investigación del alumno.
La Carta Fundacional de la Fundación Estudio, define con precisión el reto de continuar el proyecto renovador que iniciaron los institucionistas a finales del siglo XIX, para ser capaces de prever y dar respuestas a la continua evolución de nuestra sociedad y a la búsqueda de la excelencia de su proyecto pedagógico.
Producido por EcoBrands