Las temperaturas globales no hacen más que aumentar año tras año, y la sociedad y su modelo productivo tienen gran parte de culpa por la emisión a la atmósfera de gases que producen el llamado efecto invernadero. Es por ello que empresas como EDP se han postulado como líderes para una alternativa sostenible, fomentando las energías renovables en el entorno y reduciendo así la contaminación. De esta manera, EDP se ha propuesto uno de los planes de negocio más ambiciosos de los últimos años, con la planificación de una inversión de 25.000 millones de euros destinados a acelerar la transición energética entre 2023 y 2026.
El objetivo de la compañía es acelerar lo máximo posible este proceso ya que la conservación de los ecosistemas tal y como los conocemos está en juego. Porque, según declaró la Agencia Internacional de la Energía (IEA), todavía es posible limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados de acuerdo con lo establecido en el Acuerdo de París. Esta es la razón por la que EDP busca ser 100% verde en 2030: un camino que emprendió hace años y continúa firme dando pasos decisivos para su consecución.
En primer lugar, EDP está transformando sus centrales térmicas en green hubs vinculados a las energías renovables, el almacenamiento de energía, la flexibilidad del sistema eléctrico y el hidrógeno verde. En cuanto a la utilización de este elemento, la empresa ya está avanzando con sus proyectos, como el del valle asturiano del hidrógeno verde, en Aboño (Asturias), con la tramitación ambiental de su primera fase (150 MW de electrólisis) ya iniciada. Este proyecto constituye un ejemplo único en Europa de transición energética justa, como demuestra la obtención de la acreditación IPCEI (Proyecto Importante de Interés Común Europeo) de la Comisión Europea. Esta primera fase supondrá una inversión de más de 200 millones de euros. También en esta comunidad, EDP ha iniciado las tramitaciones para desarrollar 5 MW de electrolizadores en la central de Soto de Ribera.
En la central de Los Barrios (Cádiz), EDP está avanzando con la primera fase (130 MW de electrolizadores) del proyecto que convertirá el emplazamiento en el valle del hidrógeno verde del Campo de Gibraltar. A su vez, continúa trabajando en el futuro de la central de Puente Nuevo, vinculándola a las energías renovables y transformándola en la energía verde de Córdoba, gracias a la construcción y puesta en marcha de parques fotovoltaicos.
Aparte de la potenciación del hidrógeno verde y de la energía fotovoltaica, EDP también se muestra a la vanguardia con otras formas de generación de energía como la hidroeléctrica. En este sentido, la compañía está avanzando en la construcción de una de las mayores centrales hidroeléctricas con hidrotornillos del mundo situada en Pilotuerto (Asturias), con una capacidad de 700 KW y que evitará la emisión de 1.000 toneladas de CO2 anuales a la atmósfera, equivalente a plantar 75.000 nuevos árboles.
EDP también ha centrado sus esfuerzos en las redes eléctricas, el componente fundamental por su papel vertebrador en la transición energética . Asimismo, destinará 4.000 millones de euros a su desarrollo, modernización y digitalización en las zonas donde desarrolla su actividad. En España suma más de 50.000 kilómetros entre sus tres distribuidoras (Begasa, E-Redes y Viesgo) y es la compañía de distribución eléctrica que tiene la mejor calidad de suministro, según el índice TIEPI (Tiempo de Interrupción Equivalente a la Potencia Instalada).
EDP está volcada con el crecimiento verde, e iniciativas como la ocurrida en el Teatro EDP de la Gran Vía madrileña lo demuestran. Y es que el pasado mes de octubre tuvo lugar una reinterpretación de la obra más famosa de Vivaldi, Las cuatro estaciones, pero con una particularidad: el compositor y director, Hachè Costa, modificó la partitura en función de las alteraciones meteorológicas de la actualidad, fruto del cambio climático.
Lo hizo en base a un estudio realizado por el Meteorólogo Superior del Estado Ernesto Rodríguez, quien comparó el clima de la época de Vivaldi con el actual. Como resultado de estos cambios, en Las ¿Cuatro? Estaciones: 300 años después, el verano duró más y se caracterizó, entre otras cosas, por las fuertes tormentas.
Producido por EcoBrands