
Casi dos siglos escribiendo la historia de la relojería de lujo. Esa es la gran carta de presentación de TAG Heuer, fundada en el siglo XIX por Edouard Heuer en las montañas del Jura en Suiza.
El gran expertise que la marca ha ido atesorando a lo largo de 160 años se une a su afán de innovación como demuestra su nueva generación del reloj Connected, unos modelos en los que la elegancia y la deportividad se unen para ofrecer uno de los dispositivos inteligentes de alta relojería más especiales. Y es que en 2015 TAG Heuer fue pionera en el segmento de los relojes conectados de lujo.
En este sentido el modelo TAG Heuer Connected se ha consolidado como líder mundial en el sector y ahora llega en dos formatos: 45 mm y 42 mm. El primero de ellos, el más grande, combina un diseño deportivo con las características de un reloj tradicional de alta calidad con un rotundo bisel de cerámica. Entre las novedades que ofrece destaca una corona de un diámetro mayor que sobresale del reloj, dejando así mucho espacio para acceder a ella y permitiendo ajustarla y utilizarla solo con la punta de un dedo. Por su parte, los pulsadores tienen un tacto mecánico y el reloj está inclinado hacia dentro de manera que resulta más ligero en la muñeca.
En el caso del modelo más pequeño, la imagen que ofrece es sofisticada con el objetivo de que pueda lucirse igual de bien en eventos elegantes como en la oficina o para practicar deportes. Como señas de identidad, la caja es más fina y en su diseño aparecen plenamente integrados los pulsadores ergonómicos de acero, un bisel fino y el brazalete.

Deporte y tecnología con estilo
TAG Heuer Connected no solo se ha propuesto dar un aire de elegancia a sus clientes, sino que también quiere ser útil. Por ello, el modelo de 45 mm ofrece un 30% más de batería, mientras que en el modelo más pequeño los usuarios pueden disfrutar un día entero con la aplicación Wellness sin que se agote la batería.
Por otro lado, gracias a la tecnología Bluetooth 5.0 se ofrece una transferencia de datos al doble de velocidad, con una sincronización más rápida y fluidas. Además, incorpora un altímetro que registra la altitud en la ubicación permitiendo un seguimiento más preciso de actividades en exteriores tales como running o ciclismo. El dispositivo funciona simultáneamente con otros sensores del reloj, incluidos acelerómetro, monitor de frecuencia cardíaca, brújula y GPS. Todo ello con una nueva pantalla que ofrece prestaciones de calidad y contraste líderes en el sector, en particular en exteriores, donde, gracias a su fuerte relación de contraste, las esferas y las notificaciones y métricas deportivas permanecen visibles hasta a plena luz del sol.

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