Conceptos como los de sostenibilidad, cambio climático, mejoras sociales o buena gestión empresarial han ido ganando importancia en la sociedad en los últimos años, sobre todo a raíz de la pandemia. Así la inclusión de los criterios ESG, acrónimo de Environmental, Social y Governance por sus siglas en inglés, está siendo cada vez más demandada por la sociedad, los inversores y el mercado. De hecho, en el año 2009 la inversión sostenible suponía apenas un 13% sobre el total de activos, mientras que en 2020 este porcentaje ya alcanzó el 54%, siendo la primera vez que las inversiones con características de sostenibilidad superaban a las tradicionales, según Spainsif.
Una realidad a la que el sector de la construcción no es inmune. Por ello, AENOR, la entidad líder en certificación en España, ha lanzado la Certificación Edificio Sostenible. Un sello pionero en el mercado, ya que por primera vez tiene en cuenta los criterios ESG. Estos indicadores se evaluarán durante el proyecto básico, el proyecto definitivo y la ejecución, y la entrega del edificio, así como el uso de este. Precisamente, este es otro distintivo de este sello, ya que contempla todo el ciclo de vida del edificio. Y además tiene en cuenta no solo los aspectos medioambientales, si no también aquellos de carácter social y de buen gobierno de las empresas que intervienen en el proceso de construcción.
A este respecto, Europa quiere convertirse en punta de lanza de la sostenibilidad y ser el primer continente climáticamente neutro de aquí a 2050. Un objetivo en el que el sector de la construcción tiene un papel fundamental. Como explican desde la Comisión Europea, esta industria utiliza alrededor de la mitad de todos los materiales extraídos, la mitad de toda la energía consumida y un tercio de toda el agua que se utiliza, y genera un tercio del total de residuos. Esta es la razón por la que la construcción es un objetivo clave de la política de la Comisión Europea para una economía circular.
De este modo, la Certificación Edificio Sostenible requerirá la incorporación a la construcción de un porcentaje mínimo de productos fabricados bajo criterios de sostenibilidad y, por otro lado, se evaluarán los impactos del edificio según los macrobjetivos de Level(s), el marco de evaluación desarrollado por la Comisión Europea. Cada indicador de Level(s) se ha concebido para vincular el impacto de un edificio con las prioridades de sostenibilidad de la Unión Europea entre las que se encuentran las emisiones de gases de efecto invernadero a lo largo del ciclo de vida del edificio; que los ciclos de vida de los materiales sean circulares y eficientes en cuanto al uso de recursos; un uso eficiente de los recursos hídricos; o la adaptación y resiliencia al cambio climático.
Esta nueva certificación de AENOR nace para ser accesible a la mayoría de las tipologías de edificios y construcciones, nuevos o en uso. Para ello se han tenido en cuenta los aspectos exigibles en edificación residencial y terciaria, incluyendo edificios de concurrencia pública (edificios de oficinas, centros comerciales, edificios públicos...) y rehabilitación integral. De esta manera, la Certificación Edificio Sostenible de AENOR ayuda a los arquitectos, constructores, promotores y otros profesionales a alinear sus proyectos con los criterios de sostenibilidad actualmente existentes en Europa.
Así, el objetivo es que sea un importante instrumento que genere confianza entre la ciudadanía, las administraciones públicas y los inversores al dar respuesta a las necesidades en materia de sostenibilidad en todas sus dimensiones.
*Ofrecido por AENOR
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