
¿Usamos bien el dinero en efectivo? A pesar de que la mayoría de la gente respondería que sí a esta pregunta casi ofendida, lo cierto es que hay situaciones concretas en las que a veces desconocemos nuestros derechos y limitaciones.
Los pagos en efectivo no tienen misterio cuando solo se manejan cantidades pequeñas, pero a medida que se añaden ceros, empiezan a operar normas que conviene conocer. Por eso la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha elaborado una lista de consejos y pautas importantes a tener en cuenta a la hora de usar efectivo:
1. Salvo que lo avisen de forma visible, los comercios no tienen derecho a rechazar billetes de importe alto (200 o 500 euros), aunque en la práctica es muy común.
2. En las compras de bienes o servicios, no puede pagar en efectivo más de 2.500 euros por operación y no vale que divida una factura de monto superior en varios pagos por mucho que cada uno sea inferior al límite. Por ejemplo, no vale hacer dos pagos en metálico de 2.000 euros para satisfacer una factura de 4.000. Solo se admite si la transacción se realiza en el banco, con su supervisión. Vamos, que para los pagos de ese tipo se debería elegir un medio alternativo, como una transferencia.
3. El banco está autorizado a pedirle que se identifique si quiere ingresar más de 3.000 euros o cobrarlos en efectivo a través de un cheque; también cuando tenga la impresión de que puede haber algo raro en sus intenciones (blanqueo, fraccionamiento de pagos para eludir la identificación...).
4. Si quiere entrar o salir de España con más de 10.000 euros encima, tendrá que declararlo a través del modelo S-1. El trámite se hace en las aduanas o en el banco cuando el dinero se retira de allí en todo o en parte. Si le pillan sin hacer el trámite, le pueden multar con un mínimo de 600 euros y un máximo igual a la mitad de la cantidad no declarada.
5. Si quiere circular por España con más de 100.000 euros en efectivo, también tiene que declararlo en el modelo S-1, so pena de que le apliquen una multa como la del punto anterior.
6. Si saca del banco una cantidad de dinero importante, guarde siempre el resguardo de la operación. Puede que más adelante lo quiera ingresar de nuevo y Hacienda lo interprete como una ganancia no justificada. Demostrar que era suyo le librará de un impuesto astronómico (hasta el 48%).
7. Si ingresa dinero en efectivo en una cuenta de la que no es usted titular, el banco no debería cobrarle comisión. Pero en la práctica cada vez son más los que lo hacen porque sí se permite el cobro por cualquier "adorno" que le ponga a la operación: indicar el nombre del ordenante, indicar el concepto... Le puede ocurrir que vaya a ingresar 20 euros para reservar una plaza en un curso ¡y le cobren 10 de comisión! Infórmese de si puede hacer el pago por transferencia.