
Un banco alemán, el Skatbank, va a aplicar a partir del 1 de noviembre tipos de interés negativos a sus depósitos a un día a clientes privados, pero sólo a los grandes patrimonios que superen los 500.000 euros. ¿Llegará el momento de pagar por un depósito bancario?
Los medios de comunicación alemanes se han hecho eco esta semana de la idea de este pequeño banco en la localidad de Altenburg, una ciudad en el Estado federado de Turingia (centro de Alemania) que es conocida por un juego de cartas llamado Skat.
Superiores a 500.000 euros
El Skatbank, filial del banco cooperativo alemán VR-Bank Altenburger Land, informa en su página web de que penalizará los depósitos superiores a 500.000 euros a un día con una tasa de interés negativa del 0,25 %.
El Skatbank se concentra en los servicios financieros en internet para empresas y también a clientes privados y asociaciones.
Se trata del primer banco alemán que aplica un tipo de interés negativo a sus depósitos a clientes privados; algunos ya lo han hecho a las empresas.
"¿Es una broma o una nueva tendencia? se preguntaba esta semana el diario alemán "Handelsblatt".
Han saltado las alarmas en Alemania, un país de ahorradores, en el que en casi todos los hogares hay una hucha, se enseña a los niños a ahorrar desde pequeños y la última semana de octubre las cajas de ahorros y bancos celebran el Día Mundial del Ahorro.
El Día Mundial del Ahorro fue creado en 1924 cuando 29 países acordaron, en el primer congreso internacional de cajas de ahorro celebrado en la ciudad italiana de Milán, la conveniencia de recordar la importancia del ahorro para la economía.
El Día Mundial del Ahorro se celebra generalmente el 31 de octubre, aunque en Alemania y Austria se hace un día laboral antes porque el 31 es festivo en algunos Estados federados.
Cuestión de cultura
Es muy frecuente en Alemania que se enseñe a los niños a guardar durante un tiempo en una hucha el dinero que reciben de regalo de sus padres y abuelos e ir al banco o caja de ahorro cuando la hucha está llena para ponerlo en una libreta.
A comienzos de año, los niños alemanes van al banco o caja de ahorro con sus padres para ver cómo se cargan en la libreta de ahorro los intereses sobre su dinero.