
La tecnología y la sofisticación en los pagos han revolucionado la manera de consumir. Comprar las zapatillas de moda, un televisor, el último videojuego o hasta una pizza y pagarlo a plazos sin intereses se ha convertido en algo habitual. Es la realidad que ofrece el sistema de pagos conocido en la jerga financiera como "buy now, pay later" o "compra ahora, paga después" (BNPL, por sus siglas en inglés) donde el e-commerce permite fraccionar las compras sin intereses para favorecer la venta, apoyándose en proveedores financieros a los que cede una parte del margen en el precio del artículo.
Su despegue es meteórico. Según un estudio de Floa y Kantar, en España lo utilizan con frecuencia el 58% de los consumidores y dos tercios cambiarían de comercio para tener esta opción de pago. Y un estudio de Juniper Research augura que el valor de sus operaciones aumentará un 106% en todo el mundo de aquí a 2028, impulsado por los avances normativos y el aumento de las transacciones comerciales entre empresas (B2B).
La gran banca y algunas entidades medianas han irrumpido en la nueva operativa, pero la realidad es que hoy la tarta continúa dominada por grandes fintech por la dificultad para medir adecuadamente los riesgos. "Se está produciendo un desarrollo acelerado del BNPL en España en este momento, fundamentalmente liderado por las entidades especializadas en financiación BNPL como son Klarna, SeQura, Scalapay o Floa, entre otras. Los bancos tradicionales no tienen el mismo nivel de experiencia y conocimiento específico para desarrollar esta financiación", explica Jon Egaña, General Manager de Equifax Iberia.
Para ayudar a especialistas y también a la banca a rodar este tipo de financiación, que ya demandan los consumidores, Equifax ha diseñado una herramienta con un modelo de scoring específico que predice las probabilidades de impago de un consumidor BNPL.
El Risk Score BNPL de la compañía permitirá a las entidades evaluar sus solicitudes en tiempo real para asegurar la rentabilidad de las operaciones, prevenir el sobreendeudamiento de los usuarios y ofrecer condiciones más atractivas, sin alterar los tiempos ni la experiencia del cliente. Equifax es uno de los gigantes mundiales especializados en gestión de información crediticia y análisis de datos, y el que gestiona en España, junto con Asnef, el fichero de morosidad que utilizan todas las entidades antes de prestar a clientes.
Prevenir el sobreendeudamiento
La financiación en el punto de venta es algo que la banca conoce bien, con décadas rodándolo con éxito. Tradicionalmente se ha permitido al consumidor fraccionar en varios pagos artículos que resultaban más difíciles de sufragar al contado como muebles, electrodomésticos o un viaje de 2.000 euros, pero el BNPL lo transforma.
"Hoy en día, los canales digitales de distribución permiten escalar la oferta de financiación a cualquier tipo de producto, y de cualquier importe. Se han desarrollado una serie de soluciones push donde se ofrece la financiación BNPL casi por defecto, poniendo a disposición de los consumidores aplazar el pago en 3 o 6 cuotas, incluso para pagar una pizza Papa John´s de 25 euros por ejemplo", indica Egaña.
El problema es que "existen cada vez más consumidores, y aquí está el riesgo, que han cogido el hábito de pagarlo todo en tres plazos, cada vez que se les ofrece, y no solo los grandes desembolsos extraordinarios de un hogar". "No tiene el mismo perfil crediticio un consumidor que financia una variedad pequeña de compras online todas las semanas, que un cliente que quiere contratar una tarjeta de crédito, que otro que va a solicitar una financiación para comprar un automóvil", señala.
En el usuario BNPL ha mutado el comportamiento e implica una doble amenaza para la banca con el que Equifax busca dar respuesta con su herramienta. Por un lado, hay un riesgo de afectar a la capacidad de pago del cliente que les interesa conocer. "Si sus clientes estuviesen perdiendo el control de sus finanzas, rozando el sobreendeudamiento, y poniendo en riesgo su capacidad de pago, el riesgo de impago no afectaría únicamente a estas operaciones de BNPL sino que pone en riesgo también el impago de los productos financieros "clásicos" que mantienen con ellos", refiere Egaña.
Desde la óptica estratégica, apunta que es un espacio que ocupan empresas rivales: "Donde ellos podrían estar con su cliente comprando con su medio de pago habitual y financiando (o no) esa compra con tarjeta revolving de pago fin de mes, ahora se están encontrando con que sus clientes de tarjeta reciben cargos en ella asociados a los aplazamientos que han podido contratar con Klarna o SeQura por ejemplo, que son quienes financian en modalidad BNPL y luego realizan los cargos de las cuotas de cada compra aplazada en el medio de pago tradicional".
La solución de Equifax está dirigida tanto a Fintech y especialistas, como a entidades financieras tradicionales, ayudando a evaluar la solvencia de los consumidores en tiempo real y en ese entorno. Según sus cifras, Equifax es consultada ya en el 95% de las solicitudes de financiación BNPL en España.