
El gigante estadounidense de alimentos envasados Mars, dueño de las marcas de dulces como M&M's y Snickers y de cuidados de mascotas como Whiskas y Royal Canin, explora la compra de Kellanova KN, fabricante a su vez de los populares snacks Pringles y Cheez-It.
Si prosperan las conversaciones, cristalizaría una de las mayores transacciones en el sector de la alimentación, dado que el valor de mercado de Kellanova ronda en la actualidad los 27.000 millones de dólares, incluyendo la deuda, según anticipó este lunes la agencia Reuters.
Las acciones de Kellanova han subido aproximadamente un 20% desde que se separó de Kellogg Company en octubre pasado aunque todavía cotizarían con un descuento respecto de algunos de sus pares como Hershey y Mondelez International, lo que las convierte en un potencial objetivo de adquisición.
Las fuentes consultadas por Reuters puntualizaron que no hay certeza de que Kellanova llegue a un acuerdo con Mars, pero su cotización escalaba hoy en el mercado más del 14% al conocerse las conversaciones.
La adquisición de Kellanova daría a Mars una mayor variedad de marcas de alimentos, como Pringles, Cheez-It y Pop-Tarts, junto a los gofres Eggo, la marca de comida vegetariana MorningStar Farms y algunas marcas de cereales.
También ayudaría a Mars a crecer en los mercados internacionales ante un entorno de retrocesos en los volúmenes de venta.
Las transacciones en el sector de alimentos envasados ?han sido sólidas, ya que las empresas buscan escala para resistir el impacto de la inflación de precios y de los medicamentos para bajar de peso que pesan sobre la demanda.
El año pasado, JM Smucker adquirió el fabricante de Twinkies, Hostess Brands, por 5.600 millones de dólares, y se unieron dos grandes fabricantes estadounidenses de snacks.
La operación de referencia, por su importancia en el sector, fue la megafusión entre Heinz y Kraft lograda hace casi una década, y las posteriores han sido inferiores porque los reguladores antimonopolio de EEUU se han preocupado más de que tales transacciones conduzcan a precios más altos y menos opciones para los consumidores.