
La entidad financiera Abanca y cofradías de la provincia de Pontevedra han renovado su acuerdo de colaboración que ofrece soluciones financieras para apoyar la renovación de la flota y garantizar el relevo generacional en el sector.
Este nuevo convenio pretende impulsar más proyectos empresariales y mejorar la competitividad de los ya existentes. En concreto, se prevén líneas financieras con condiciones específicas para pescadores jóvenes y para promover embarcaciones más seguras y eficientes.
Asimismo, Abanca ofrece otros productos como pólizas de crédito que permiten paliar las consecuencias económicas de paros biológicos, así como ceses y disminuciones de actividad marisquera.
La encargada de firmar el renovado convenio fue la directora territorial de Abanca en Pontevedra, Carmen Fernández Penas, con representantes de las cofradías de Pontevedra, Lourizán, Marín, Vilaboa, Bueu, Carril, Raxó, Sanxenxo, Portonovo, Vilanova, O Grove, A Illa, Cambados, Vilaxoán, Lonxa de Campelo y Parquistas de Carril.
Este encuentro también ha servido para trasladar a estos colectivos las acciones desarrollados en el marco de Plancton, conocido como el plan de conservación territorial que impulsa Afundación.
Bonos
Al margen del convenio, Abanca ha indicado que finalmente se han acogido a su oferta de recompra, los titulares de 274,4 millones de euros en bonos, de los 350 millones que se componía la emisión original, según ha informado la entidad gallega en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La recompra anticipada (ya que la fecha de primera amortización estaba prevista para el 18 de enero de 2024) se realizará el 23 de junio de 2023. El banco tendrá que realizar un pago de intereses devengados en relación con los bonos ofrecidos y aceptados para su recompra.
Para ejecutar este programa el banco realizó una emisión de 500 millones de euros, al que se han podido adscribir los tenedores.
Los bonos se han recomprado a un precio del 100,5% del principal ofertado en su momento. A esta cantidad hay que sumar los intereses devengados y no pagados.