
España ocupa el quinto puesto por la cola en educación financiera, según el Informe Europeo de Pagos de Consumidores elaborado por Intrum. Concretamente, el 76% de los españoles asegura haber recibido una correcta educación financiera. Pero esta cifra se sitúa solo por encima de Italia (72%), Polonia (72%), Lituania (71%) y Hungría (70%).
La educación financiera, entendida como la capacidad de comprender como funciona el dinero y la gestión económica, es fundamental para una correcta inclusión social.
En esta línea, Banco Santander ha reforzado su compromiso con la inclusión, y aumentó su apuesta por la educación financiera en España durante 2022, en el marco de su agenda de Banca Responsable.
Para Marta Aisa (M), directora de Banca Responsable de Santander España, "la educación financiera es un factor clave para la inclusión. Nuestro objetivo es acercar el mundo de la economía y las finanzas a todas las personas, especialmente a los colectivos más vulnerables, y con foco en los mayores, para que entiendan los conceptos financieros de forma clara, y sean capaces de gestionar su economía cotidiana y tomar las decisiones más adecuadas según sus necesidades".
Por ello, y para conocer un poco más en profundidad esta iniciativa, le hemos hecho algunas preguntas a Aisa (M) sobre las actividades desarrolladas durante 2022:
¿Qué es lo que más anima a los profesionales del Santander a participar de forma voluntaria fuera de su horario de trabajo?
(M): Sin duda, los voluntarios son la piedra angular de nuestra propuesta de educación financiera. Detrás de su compromiso hay tres motores principales. En primer lugar, refuerza su contribución directa a la sociedad. De hecho, Finanzas para Mortales es un proyecto que tiene un foco local precioso, en el que los profesionales del banco se involucran de manera directa con su entorno más cercano. En segundo lugar, a través de su participación los empleados desarrollan capacidades y habilidades necesarias como la colaboración, el trabajo en equipo, le liderazgo, la empatía y la creatividad. Por último, es una herramienta poderosa de compromiso para nuestros profesionales y refuerza su sentido de pertenencia y vinculación.
¿Cuáles son las principales demandas de los beneficiarios de estas acciones de educación financiera?
(M): En general, la principal demanda es que les acerquemos al mundo de la economía y las finanzas básicas de una manera sencilla y práctica. Quieren comprender conceptos económicos y financieros de forma clara que les faciliten la gestión de su economía cotidiana y tomar las decisiones más adecuadas sobre cómo administrar su dinero de manera responsable y eficaz, fomentando el hábito del ahorro y la planificación del gasto. La educación financiera también implica conocer el manejo de las herramientas digitales que les permitan operar de forma segura, protegiendo su información personal y evitando ser víctimas de fraude.
¿Cuáles son los objetivos para el 2023 en esta materia?
(M): Para 2023 queremos seguir consolidando nuestra apuesta por la educación financiera reforzando nuestra ayuda a ciertos colectivos, en especial los mayores -que ya iniciamos en 2022 con Finanzas para Mortales edición senior- y los niños en edad escolar, pues entendemos que es una formación esencial en su desarrollo futuro. Todo ello sin dejar de lado el resto de beneficiaros prioritarios para nosotros como emprendedores sociales, jóvenes o colectivos en riesgo de exclusión. Desde el punto de vista de contenidos, seguiremos ampliando temáticas y trabajando en el gap digital a través de jornadas específicas y materiales adaptados.
La entidad pretende evitar que colectivos que son financieramente vulnerables se queden atrás, centrándose, principalmente, en niños y adolescentes, personas mayores, personas privadas de libertad, mujeres inmigrantes y otros colectivos en riesgo de exclusión social.
Santander promueve diversas iniciativas para fomentar la cultura financiera, dotando de conocimientos financieros básicos, sobre manejo de la banca digital o ciberseguridad. Gracias a esto, más de 82.000 personas se han beneficiado de estas actividades, entre las que destaca Finanzas para Mortales. Este es uno de los programas que ha tenido un mayor éxito y reconocimiento a nivel nacional.
En 2022 colaboraron el doble de voluntarios que la edición anterior y más de 370 empleados han participado como formadores en todas estas actividades. En esta ocasión, han prestado especial atención al colectivo de personas mayores.
A través de los programas Finanzas para Mortales edición Senior o Educación Financiera para Mayores, los empleados voluntarios de la entidad han acercado los conocimientos sobre banca digital, ciberseguridad, uso de aplicaciones y funcionalidad de cajeros a más de 2.100 personas mayores de 65 años.